La reciente visita de la actriz cubana Ana de Armas a su país natal ha generado controversia, incluso entre otros artistas cubanos. Susana Pérez, también actriz y radicada en Miami, criticó la decisión de De Armas de viajar a Cuba para celebrar su cumpleaños 35, señalando que esto podría ser interpretado como una forma de “validar la dictadura”. En este artículo, examinaremos las diferentes opiniones sobre el viaje de Ana de Armas y cómo esto ha generado un debate más amplio sobre la relación de los artistas cubanos con el régimen.
En su programa de radio, Susana Pérez expresó su preocupación por la postura política de Ana de Armas durante su viaje a Cuba. Pérez mencionó que la visita de De Armas podría ser vista como una validación del régimen comunista en la isla, especialmente después de que se publicaran fotos de la actriz en lugares asociados con el gobierno y figuras políticas.
“Cuando ves las cosas que ha hecho Ana en La Habana, tú dices, caramba, yo me quiero ir para Cuba, qué bueno es todo, qué lindo es aquello, cómo se divierte la gente”, dijo Pérez. “Hay que tener los pies en la tierra, hay que ser consecuentes”.
De hecho, la visita de Ana de Armas generó controversia en la prensa oficial cubana, que destacó su presencia en eventos públicos y su encuentro con Lis Cuesta, esposa del presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel. Para algunos críticos, este tipo de cobertura mediática es una forma de utilizar a los artistas para legitimar el régimen.
Sin embargo, otros artistas cubanos han defendido la decisión de De Armas. La actriz Mirtha Ibarra, por ejemplo, señaló que Ana de Armas no necesita justificar su visita a Cuba, ya que ella tiene derecho a regresar a su país natal y conectarse con su cultura y origen.
“Ana ha demostrado suficientemente en su carrera y en su vida que es una mujer libre, que puede ir donde le dé la gana”, dijo Ibarra. “Si fuera una persona en busca de publicidad, se hubiera presentado en la televisión cubana y en la Asamblea Nacional”.
Otro punto de conflicto son las opiniones políticas de Ana de Armas. Algunos críticos apuntan que la actriz nunca se ha pronunciado sobre la difícil situación política y social en Cuba, incluyendo la represión y prisión de opositores al régimen. La propia Susana Pérez señaló que la interpretación de Ana de Armas en la película La Red Avispa, sobre espías castristas infiltrados en Miami, fue una “metedura de pata” que podría interpretarse como un respaldo al régimen.