Una madre cubana compartió en redes sociales la desgarradora experiencia que vivió cuando su hija, una bebé de un año, se encontraba gravemente enferma y necesitaba ser trasladada con urgencia al hospital. Al llegar a la parada del rutero, donde había una larga fila de personas, pidió hablar con el chofer de una gacela para explicarle la situación y pedirle ayuda. Sin embargo, el conductor se negó rotundamente a ayudarla, alegando que tenía que llegar vacío a la próxima parada.
La madre cubana expresó su indignación ante lo sucedido: “Me molesté muchísimo porque es la vida de una niña que estaba en juego y viré y le tomé foto al carro y el chofer que estaba tomándose un café me dijo que le tomara una a él también”. Afortunadamente, la madre logró llegar al hospital después de hablar con el resto de la cola y obtener autorización para ingresar primero a un vehículo. La niña fue internada por la gravedad de su estado.
En los comentarios de la publicación, varias personas lamentaron la falta de humanidad del chofer en una situación tan delicada: “¿Por qué nos hemos vuelto malos uno con otros? Es inhumano. Espero que la bebé esté mejor”, dijo una internauta. Algunos sugirieron que se hiciera una denuncia en la empresa donde trabaja el chofer: “Eso es negarse a prestar asistencia a un bebé que necesita ir al hospital. De asma se puede morir cualquier persona si no recibe atención a tiempo”.
La situación de la madre y su hija refleja la necesidad de solidaridad y apoyo hacia aquellos que atraviesan momentos difíciles en la sociedad actual. En lugar de negar la ayuda a alguien que lo necesita, debemos buscar formas de ayudar y apoyar a los demás.