En Cuba, la escasez de combustible es un problema que se está agravando cada vez más. Esta realidad se puede ver reflejada en las gigantescas colas que se forman en los servicentros de gasolina, donde decenas de autos esperan horas e incluso días para poder abastecerse. En el Cupet de Boyeros, en La Habana, la cola llega desde el aeropuerto hasta Mazorra, lo que demuestra la magnitud del problema.
Según un usuario de Facebook llamado Woody Alguacil Cubano, «Continúan las colas en el nuevo mandato del singao! Me envían video y me dicen que es el Cupet de Boyeros, por Mazorra, por Rio Verde. La cola de los mil carros y 500 noches…». Las imágenes compartidas en redes sociales muestran vehículos parqueados a lo largo de varias cuadras en la avenida Boyeros. Se puede observar una fila interminable de automóviles, todos en espera de su turno para poder llenar sus tanques de gasolina.
La situación no solo se presenta en la capital, sino también en otras localidades como Managua, donde las colas son igual de largas. Por ejemplo, en el municipio Arroyo Naranjo, la situación era muy similar al Cupet de Boyeros. Las denuncias no se han hecho esperar: «En Cuba sí hay desigualdad social, mientras unos nos comemos la cola de dos y tres días, el gobierno le tiene un Cupet al MININT para que echen gasolina y sin cola. Miren la cola del Cupet de Boyeros, desde el aeropuerto hasta Mazorra», expresó Carlos Hernández Achon, un autónomo.
La crisis energética en Cuba ha generado una enorme preocupación entre los ciudadanos, quienes deben lidiar con la falta de combustible en su día a día. Incluso aquellos que logran abastecerse deben hacerlo en pequeñas cantidades, ya que el gobierno ha racionado el suministro. Esto significa que muchas personas deben recurrir a otros medios de transporte, como la bicicleta o caminar, para poder movilizarse por la ciudad.
La situación es tan crítica que algunos conductores han tenido que abandonar sus vehículos en la vía pública debido a la falta de combustible. Sergio Yudier de la Cruz, un chofer de Pinar del Río, relató en Facebook que tuvo que regresar del servicio sin poder llenar su tanque:
«La cola era de más de un kilómetro y dentro del Cupet no había un lugar que no hubiera ni una moto ni un carro. Fui y viré de Mariel con la reserva, casi al quedarme bota’o». Este tipo de situaciones son cada vez más comunes en Cuba.
Las colas para comprar combustible son solo una muestra de la difícil situación económica y social que atraviesa el país. La escasez de alimentos, medicinas y otros productos básicos también afecta a la población cubana. Ante este contexto, los ciudadanos han comenzado a manifestarse, exigiendo soluciones y cambios que mejoren su calidad de vida.
En resumen, la crisis energética en Cuba ha generado enormes colas para comprar combustible en todo el país. Los ciudadanos deben lidiar con la falta de suministro y con racionamientos impuestos por el gobierno, lo que genera una enorme preocupación y malestar en toda la población. Es necesario buscar soluciones que permitan mejorar esta situación y garantizar una vida digna para todos los cubanos.
