El miércoles pasado, el actor cubano Héctor Noas recordó el estreno de la serie de aventuras y ciencia ficción Shiralad, que se emitió hace 30 años en los espacios de Aventuras de la Televisión Cubana. Noas destacó la importancia de esta emblemática serie que, aun sin contar con tecnología avanzada, sorprende por su altísimo nivel en cada categoría.
Durante el Período Especial, una crisis económica que afectó a Cuba en los años 90, era impensable realizar producciones televisivas con grandes efectos especiales y recursos técnicos avanzados. Sin embargo, la serie Shiralad demostró que el talento y el amor por la producción artística no conocen límites.
Héctor Noas, quien interpretó el papel de un ciberinstructor humanoide en la serie, recordó lo difícil que fue llevar a cabo esta producción en esos tiempos complicados.
“Todos nos preguntamos cómo pudimos hacer algo así en pleno Período Especial donde ni agua teníamos prácticamente y no existían los “efectos especiales”. Hay una sola respuesta: el talento y el amor de cada uno de los que estuvimos ahí, dándolo todo sin pedir nada a cambio”, afirmó el actor.
Shiralad es una serie de ciencia ficción y aventuras cuya trama gira en torno a una nave-escuela terrícola que sufre un accidente en el espacio, dejando como única superviviente a una joven astronauta y su compañero androide.
La nave cruza un agujero negro que la conduce al planeta Shiralad, un lugar parecido a la Tierra en la época medieval, donde tres ciudades-estado y varios pueblos nómadas comienzan a rebelarse contra la ciudad-santuario que quiere tener el dominio absoluto.
La serie se basó en una novela del escritor cubano Chely Lima, quien falleció en enero pasado en Miami. Shiralad se convirtió en una de las producciones más emblemáticas de la televisión cubana y sigue teniendo un gran número de seguidores en todo el mundo.
Héctor Noas, un actor con una dilatada trayectoria en el cine y la televisión cubana, actualmente participa en la nueva serie española Montecristo junto a William Levy.
Entre sus trabajos destacan películas como “Los dioses rotos” de Ernesto Daranas, “La Pared” de Alejandro Daranas, y “Verde Verde” de Enrique Pineda Barnet. En la televisión también se le recuerda por sus personajes de Anselmo Prieto en la telenovela “Para el año que viene” y Pablo Murillo en “Entre mamparas”.
El legado de Shiralad sigue vivo en Cuba y es considerado una muestra del talento y la capacidad creativa de los artistas cubanos, aun en tiempos difíciles. Esta producción televisiva es un ejemplo del valor cultural que tienen las producciones audiovisuales y su importancia en la identidad y memoria colectiva de un país.
