La crisis de combustible en Cuba continúa y sus consecuencias se hacen cada vez más evidentes en las calles de la isla. Los altos precios del transporte privado son solo una muestra de ello.
Una vecina de Nuevo Vedado, llamada María, necesitaba un servicio de transporte para ir del hospital Manuel Fajardo a su casa. María había obtenido recientemente un visado para reunirse con su hijo en Estados Unidos y necesitaba los resultados de un chequeo médico para su entrevista en la embajada. La escasez de combustible hizo que la búsqueda de un servicio de transporte fuera difícil y costoso. María se puso en contacto con una agencia respetada por su eficacia, pero solo pudo encontrar un conductor dispuesto a realizar el servicio, que le cobraría 1.000 CUP (pesos cubanos).
María explicó a 14ymedio que ha estado usando esta agencia durante meses porque una amiga se lo recomendó. Su amiga había sido trasladada a una cita consular un día después del huracán Ian, cuando las calles estaban bloqueadas por ramas y escombros. La agencia de transporte se tomó en serio su compromiso y la llevó a su destino. María aceptó el precio inicial de 600 pesos, pero cuando no recibió información sobre el modelo del auto y el nombre del conductor, volvió a contactar a la agencia. Fue entonces que le informaron que el precio había subido a 1.000 pesos.
La situación de inseguridad en la ciudad hizo que María aceptara el precio elevado. No podía arriesgarse a ir de madrugada con su pasaporte encima, y además, el resto del camino lo tendría que hacer a pie. «Todo eso en el mismo municipio de Plaza de la Revolución, o sea, ese precio por un tramo muy corto», dijo María a 14ymedio. Los altos precios del transporte privado en Cuba son una consecuencia directa de la escasez de combustible.
Pero el transporte privado no es el único afectado. Las plataformas de mensajería como Mandao también están sufriendo las consecuencias de la falta de combustible. Un empleado de Mandao explicó que en estos momentos solo están trabajando en la entrega los que tienen bicicleta o una moto eléctrica. A pesar de ser menos valorados antes de la crisis, ahora se han convertido en una opción valiosa para aquellos que necesitan hacer envíos rápidos.
Los bicitaxis también han elevado sus costos debido a la ley de la oferta y la demanda. Una clienta se quejaba de que «todos los precios van p’arriba», y esto parece ser una tendencia en todo el país.
El viernes pasado, el mandatario Miguel Díaz-Canel intentó ofrecer explicaciones para la falta de combustible, pero como en otras ocasiones, solo señaló a terceros como chivos expiatorios. «Los países que tienen con nosotros determinados compromisos para suministrarnos gasolina a partir de los convenios que tenemos han estado también en una situación energética compleja», dijo en una reunión en Santa Clara con dirigentes provinciales del Partido.
