El Gato de Cuba sale de prisión y asegura que regresará con sus críticas abiertas contra el Gobierno y Díaz-Canel

Redacción

El prisionero político Yoandi Montiel Hernández, también conocido como El Gato de Cuba, finalmente salió de la cárcel después de cumplir una condena de dos años de privación de libertad por el delito de desacato debido a sus críticas al régimen cubano en las redes sociales. A pesar de su tiempo en prisión, El Gato aseguró en un video en vivo en Facebook que no lo habían cambiado y que continuaría haciendo lo mismo que antes de entrar a la cárcel.

El Gato dijo que aún se sentía aturdido por la experiencia de estar en prisión en Cuba, pero que «sus ojos volvían a coger el color». A pesar de la difícil situación que enfrentó en la cárcel, su determinación por decir la verdad no se vio afectada. En su directa, aseguró que continuaría haciendo lo mismo que antes de su encarcelamiento, diciendo la verdad y exponiendo la corrupción y la opresión del régimen cubano.

Las autoridades cubanas le dieron un permiso para visitar a su familia pocos días antes de que cumpliera su condena. Esto se produjo después de que su padre presentara una solicitud de beneficio de libertad condicional a mediados de enero. El Gato había sido sometido a agresiones físicas y se había alimentado mal durante su tiempo en prisión, según denunció su madre.

El Gato fue detenido por sus comentarios en Facebook, incluyendo algunos donde se burlaba del gobernante Miguel Díaz-Canel. En un video que lo llevó a prisión, El Gato atrapó a una rana y la nombró Díaz-Canel. Luego, en la entrevista, le preguntó si podía ser «un buen presidente», a lo que la rana respondió negativamente. Este video satírico se consideró una violación de las leyes cubanas de desacato y llevó a su arresto y encarcelamiento.

El caso de El Gato es solo uno de los muchos casos de detenciones arbitrarias y encarcelamientos en Cuba por parte del régimen. La libertad de expresión y la libertad de prensa son inexistentes en Cuba, y cualquier crítica al régimen puede llevar a la cárcel. La situación en la isla se ha vuelto cada vez más tensa debido a la falta de alimentos y medicinas, el aumento de la inflación y la creciente oposición al régimen.

La liberación de El Gato es una pequeña victoria para la libertad de expresión en Cuba, pero aún queda mucho por hacer para garantizar que los cubanos tengan los mismos derechos y libertades que las personas en otros países. La comunidad internacional debe continuar presionando al régimen cubano para que respete los derechos humanos y libere a todos los presos políticos.