Red de estafas desmantelada en México: un cubano detenido junto a otros extranjeros

Redacción

En México, las autoridades policiales han logrado desmantelar una red de estafas telefónicas en Colonia Juárez. Según informa el medio local La Colonia Juárez, un cubano fue detenido junto a otros extranjeros en un grupo de siete personas que se dedicaban a extorsionar y estafar a usuarios de aplicaciones móviles.

La operación policial fue posible gracias a los trabajos de inteligencia de la policía cibernética y la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México. Según La Colonia Juárez, los delincuentes montaban deudas a través de aplicaciones móviles para luego extorsionar a las víctimas y exigirles el pago.

El diario local Excelsior detalló que en los operativos contra los «montadeudas» se llevaron a cabo tres cateos en dos inmuebles que eran utilizados como call centers. En total, cuatro personas de origen chino, un cubano y dos mexicanos fueron detenidos. Según el medio, los detenidos eran menores de 30 años.

Excelsior identificó a los detenidos como Yang «N», Yanyi «N», Chao Yang «N», Yulu «N», Gabriel «N», Carlos Alan «N» y Alberto Jesús «N», de 25, 24, 25, 30, 26, 28 y 30 años, respectivamente. Los primeros dos fueron detenidos en el piso 4 del edificio marcado con el 15 de la calle Versalles, colonia Juárez, alcaldía Cuauhtémoc.

En los inmuebles donde se realizó la redada, se hallaron documentos sospechosos como 14 permisos provisionales del Estado de Guerrero, 3 facturas vehiculares, 100 teléfonos celulares, 25 envoltorios de cristal y 4 tarjetas bancarias. Además, las personas fueron halladas en posesión de 5 tarjetas de circulación vehicular de la Ciudad de México, 5 pasaportes color azul y 3 facturas vehiculares a distintos nombres.

Según la Secretaría de Seguridad Ciudadana, la investigación se inició por cobros excesivos a través de aplicaciones móviles conocidos como «Montadeudas». Personal de la Unidad de Policía Cibernética identificó la operación de una célula dedicada a realizar préstamos virtuales para después amenazar y extorsionar a sus usuarios. Los delincuentes empleaban métodos de intimidación, agresión psicológica y amenazas, que iban desde llamadas y mensajes constantes, hasta la difamación en redes sociales.