El régimen de Cuba y la corporación estatal Cimex se asociarán con el consejo empresarial Rusia-Cuba para abrir una tienda comercial en divisas, donde se venderán alimentos, productos químicos y artículos del hogar de factura rusa. Según Boris Titov, jefe del consejo empresarial, muchos fabricantes rusos están interesados en promocionar sus productos en Cuba. La tienda comercial será una empresa mixta que determinará independientemente los precios en el mercado minorista de la nación caribeña.
Titov se reunió con el embajador cubano en Moscú, Julio Garmendía, quien ya dio el visto bueno a los inversores y empresarios rusos. Solo están a la espera de la firma del contrato, aunque deberán superar las trabas logísticas que se presentan para el envío de las mercancías desde Rusia a Cuba y resolver el problema de los seguros.
Otro proyecto que se maneja en estos momentos entre ambos países es la apertura de un hotel en Cuba con capital ruso que sea independiente y especialmente para viajeros de Rusia. Los bancos cubanos ya instauraron el uso de las tarjetas bancarias del sistema ruso MIR, una facilidad extra para los turistas rusos en la isla.
El régimen cubano espera que los turistas rusos gasten sus rublos en instalaciones hoteleras cubanas, por lo que están interesados en atraer turistas en el mercado ruso y turismo corporativo, especialmente de grandes empresas que ya tienen negocios con Cuba.
El sistema ruso de pagos Mir fue ideado por Vladímir Putin a raíz de la anexión de Crimea, en 2014, al temer posibles sanciones de Occidente. Desde entonces se desarrolló el sistema, y luego de la invasión a Ucrania comenzó a implantarse en el país, cuando Visa y Mastercard, emitidas por bancos extranjeros, dejaron de funcionar.
Pese a las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea a Rusia, el régimen cubano está ansioso por atraer más empresas rusas para que trabajen en Cuba. El Ministro del Comercio Exterior y la Inversión Extranjera del régimen cubano, Rodrigo Malmierca Díaz, añadió que también están interesados en importar alimentos y materias primas que se puedan utilizar en Cuba para producir alimentos, lo cual es vital para el país.
