Hace unos días, las redes sociales se llenaron de imágenes de un auto Lada soviético circulando por las calles de Las Vegas, Estados Unidos. Un usuario en Facebook tomó las fotografías del vehículo y las compartió, generando una gran cantidad de comentarios y expresiones de asombro.
Pero lo más interesante de esta historia es la identidad del dueño del vehículo, un hombre llamado Juan Pereda, que se identificó en el post de Facebook como el propietario del Lada cubano.
Pereda, nacido y criado en Guanabacoa, La Habana, se mudó a Las Vegas en 1998 y desde entonces ha mantenido su pasión por los autos clásicos.
En el post de Facebook, explicó que su primo en Miami le envió el enlace con las fotos de su Lada circulando por Las Vegas y se mostró agradecido por el artículo que se había publicado sobre su vehículo.
El Lada 2106 es un modelo de automóvil fabricado por la compañía rusa AvtoVAZ entre 1976 y 2001.
Este modelo se exportó a varios países del mundo, incluyendo Cuba, donde se convirtió en un ícono de la industria automotriz de la época. A pesar de que el modelo ya no se fabrica, aún existen muchos fanáticos de los autos clásicos que se dedican a su conservación y mantenimiento.
Uno de los comentarios que se hizo en el post de Facebook se refería a la dificultad de mantener un auto como el Lada en Estados Unidos, especialmente en lo que se refiere al seguro. Sin embargo, Pereda ha logrado mantener su Lada en perfectas condiciones y ha recibido felicitaciones por ello.
«Felicidades por tener un auto como ese, es bien difícil de tener uno aquí, es una joya en estos tiempos, que Dios me lo bendiga y siga disfrutando de lo que le gusta», escribió un usuario en el post de Facebook.
Otro comentario destacado fue el de un usuario que expresó su sorpresa ante el poco respeto que se tienen entre ellos mismos. «¿A quién le importa si alguien maneja un Lada, un BMW o un avión?», cuestionó. Es importante recordar que, más allá del modelo de auto que se tenga, todos los propietarios comparten una pasión por los autos y merecen respeto.
La historia del dueño del Lada cubano en Las Vegas es un ejemplo de la pasión y dedicación que muchos fanáticos de los autos clásicos tienen por sus vehículos. A pesar de que este modelo ya no se fabrica y es difícil de encontrar, Pereda ha logrado mantener su Lada en perfectas condiciones y seguir disfrutando de su pasión por los autos clásicos.
Esperamos que esta historia inspire a más personas a seguir sus pasiones y disfrutar de lo que les gusta, sin importar el modelo de auto que tengan.