La situación de la delincuencia en Cuba sigue siendo una preocupación para la sociedad. En las últimas semanas, se han registrado varios casos de robos violentos, asaltos y agresiones en distintas partes del país. Uno de los casos más recientes fue el de una pareja que fue agredida con un bate en el municipio de San Germán, en Holguín, mientras regresaban a su casa en moto.
Según la activista Michaela Días García, los asaltantes intentaron robarles la moto y sus pertenencias, pero no lograron hacerlo. A pesar de esto, el esposo de la pareja, identificado como Chuchy, recibió varios golpes con el bate y tuvo que ser hospitalizado.
La denuncia de Días García pone en evidencia la falta de seguridad en el país y la necesidad de que se tomen medidas para combatir la delincuencia. A pesar de que Cuba es considerada un país seguro en comparación con otros de la región, la situación parece estar empeorando y la población está preocupada.
En la misma localidad de San Germán, se registró otro caso de asalto violento hace una semana, en el que un menor de 16 años recibió un machetazo mientras intentaban robarle su celular. El sospechoso del hecho aún no ha sido capturado y la víctima permanece en terapia intensiva.
Estos hechos han generado indignación y preocupación en la población, y también han llevado a que algunos familiares de las víctimas ofrezcan recompensas para la captura de los responsables. Es evidente que la sociedad cubana está exigiendo una mayor atención a la seguridad ciudadana y una respuesta más efectiva por parte de las autoridades.
El aumento de la delincuencia en Cuba no solo afecta a los ciudadanos, sino que también puede tener un impacto negativo en la economía del país y en el turismo, una de las principales fuentes de ingresos. El Gobierno cubano ha reconocido la importancia de mejorar la seguridad, pero aún hay mucho por hacer.