El equipo de béisbol de Cuba ha ganado su partido contra Australia por un estrecho margen de 4-3. Este triunfo significa que el equipo cubano avanzará a la fase de semifinales que se celebrará en Miami el próximo domingo. Este es un logro impresionante para Cuba, ya que no habían avanzado a las semifinales en 17 años.
El equipo australiano fue el primero en anotar en el segundo inning gracias a un doblete de Darryl George, un sacrificio de Whitefield y un jit de Wingrove. Sin embargo, Cuba empató el juego en la parte baja del tercer inning gracias a un doblete de Moncada al jardín izquierdo. Yariel Rodríguez, el abridor cubano, salió del juego en el cuarto episodio después de permitir una carrera y dos imparables. El estelar Luis Miguel Romero entró en su lugar y logró resolver la situación.
El fildeo de Roel Santos en el quinto ante batazo largo del segundo bate de la tanda Alex Hall fue una gran escena. Hasta el quinto inning, el equipo australiano manejó constantemente el picheo para evitar que los bateadores cubanos hicieran ajustes.
En la parte baja del quinto, Cuba llenó las bases gracias a un jit de Roel Santos al centro y dos boletos. Fue entonces cuando Alfredo Despaigne impulsó la segunda carrera de Cuba. Después, las bases se llenaron nuevamente gracias a un indiscutible de Arruebarruena. El lanzador australiano Salio Sam Holland fue reemplazado por el zurdo John Kennedy. El zurdo Guibert respondió de manera impresionante conectando un jit al derecho y empujando otras dos carreras para Cuba, poniendo el marcador en 4-2.
En el sexto, el lanzador cubano Ronni Elías permitió dos carreras después de un vuelacercas de Wingrover con un hombre en base. A pesar de esto, Elías logró lanzar el séptimo sin complicaciones y la escena quedó lista para los supersónicos Moinelo y Raydel.
En el octavo, el zurdo pinareño Moinelo dio dos ponches e igual número de pasaportes, mientras que Raydel Martínez combinando muy bien sus lanzamientos y con una velocidad entre las 94 y 96 millas dominó el noveno de uno, dos y tres, con un ponche incluido.
El equipo cubano debe sentirse muy orgulloso de este triunfo. El hecho de que no hayan avanzado a las semifinales en 17 años hace que esta victoria sea aún más impresionante. Ahora, el equipo debe prepararse para las semifinales que se llevarán a cabo en Miami el próximo domingo. Con su actuación en este juego, el equipo cubano ha demostrado que están listos para competir en el nivel más alto del béisbol.
