El difícil acceso a los recursos básicos es un problema que ha afectado a Cuba por décadas. Este miércoles, Nidia Ávila denunció públicamente que sus nietas recién nacidas no han recibido la ayuda que necesitan del Estado. Ávila señaló que, a pesar de ser un caso que demuestra los logros del sistema de salud cubano, las trillizas no han recibido los colchones y la canastilla que les corresponden, lo que ha llevado a la familia a depender de la ayuda de la Iglesia Adventista y de personas solidarias.
Este caso ha generado preocupación entre los cubanos, quienes han manifestado su solidaridad con la familia Ávila. Muchos señalan que el gobierno debe hacer más por las familias que enfrentan dificultades económicas, especialmente cuando tienen hijos pequeños.
El gobierno cubano ha prometido en múltiples ocasiones que ayudará a las familias con tres o más hijos a obtener vivienda, pero muchas personas han expresado su frustración al no ver estas promesas cumplidas en la práctica. Ávila afirmó que ha buscado ayuda del gobierno de Florida (Camagüey), donde vive, pero no ha recibido una respuesta satisfactoria.
La falta de vivienda es un problema grave en Cuba, que se ha agravado en los últimos años debido a la crisis económica y la falta de inversión en el sector de la construcción. Muchas personas no tienen acceso a vivienda propia y dependen de la ayuda de amigos y familiares, o de la benevolencia del Estado.
En el caso de la familia Ávila, el problema se ha agravado por el hecho de que la madre de las trillizas tiene otros tres hijos y no tiene un lugar donde vivir con su familia. Ávila señaló que, aunque no está pidiendo una mansión, necesita un lugar donde pueda criar a sus hijos sin preocupaciones.
La situación de la familia Ávila es una muestra más de la necesidad que tiene Cuba de una mayor inversión en el sector de la construcción y de políticas públicas efectivas para garantizar el acceso a vivienda, especialmente para las familias que enfrentan dificultades económicas.
Esperamos que esta denuncia de Nidia Ávila, así como los comentarios de los cubanos que la han apoyado, sirvan para llamar la atención del gobierno cubano y para que se tomen medidas concretas para ayudar a las familias que enfrentan dificultades económicas. No podemos permitir que nuestros compatriotas sigan viviendo en condiciones precarias, especialmente cuando se trata de niños recién nacidos que necesitan cuidados especiales.