La situación de escasez de alimentos en Cuba ha sido una constante durante décadas, pero la pandemia ha exacerbado aún más la crisis alimentaria. En este contexto, la noticia de una pelea violenta por salchichas en Isla de la Juventud no debería sorprendernos.
Según informó CiberCuba, al menos un hombre resultó herido en una cola para comprar una parte del módulo alimentario que vende el gobierno de manera racionada a la población en una tienda de la cadena TRD Caribe. El suceso ocurrió en la localidad La Fe y fue capturado en video por testigos que lo difundieron en redes sociales.
Una fuente anónima citada por CiberCuba afirmó que el agresor tenía problemas mentales y que buscó un machete después de un «lío en la cola». Aunque las autoridades locales no se han pronunciado al respecto, la ironía de un vecino cercano es significativa: «Era para comprar salchicha. Imagínate si es para otra cosa».
Este incidente no es un hecho aislado. En todo el país, las colas son una realidad cotidiana en la vida de los cubanos, y la situación se ha agravado aún más en los últimos años.
La crisis alimentaria en Cuba es el resultado de muchos factores, entre ellos el embargo estadounidense, el cambio climático, la falta de inversión en el sector agrícola y el modelo económico centralizado del gobierno. Pero lo cierto es que la población cubana sufre las consecuencias de la escasez de alimentos y la inflación desbocada.
Este suceso en Isla de la Juventud es solo una muestra más de lo que sucede en el país. En una sociedad donde las necesidades básicas no están cubiertas, la competencia por los recursos se convierte en una cuestión de vida o muerte. Las colas, la violencia, el estrés y la ansiedad son parte del día a día de los cubanos que luchan por sobrevivir en un contexto de crisis.
