El pasado jueves, dos estudiantes de la Escuela Nacional de Arte (ENA) en La Habana fueron víctimas de un asalto en el que les robaron sus instrumentos musicales, dos flautas.
José Lázaro Álvarez, profesor de la ENA, lanzó una alerta en redes sociales para pedir ayuda en la identificación de los objetos robados. El llamado de alerta fue compartido por otros músicos y personalidades del mundo del arte en Cuba.
“Todos sabemos lo que cuesta comprar un instrumento y el sacrificio que pasamos para poder tenerlos. Si a alguien le proponen alguna flauta con estas características, por favor contactarme”, pidió el profesor en su publicación.
Este lamentable hecho es una muestra más de la creciente inseguridad que se vive en Cuba. Aunque las autoridades cubanas no lo admiten del todo, la ola de asaltos en las calles ha ido en aumento en los últimos meses.
Incluso, en el perfil de periodismo ciudadano ICLEP se denunció que una anciana cubana fue asaltada por dos jóvenes que le quitaron a la fuerza dos cadenas y otras joyas en plena luz del día, en una calle de Artemisa.
La situación en Cuba es cada vez más crítica, y los ciudadanos están preocupados por la falta de medidas efectivas para combatir la delincuencia. La seguridad de los habitantes es una necesidad básica y urgente que no puede ser ignorada por más tiempo. Los estudiantes de la ENA son un ejemplo más del impacto negativo que la inseguridad está teniendo en la vida de los cubanos.
Esperamos que las autoridades cubanas tomen medidas para garantizar la seguridad de los ciudadanos y que los culpables de estos actos delictivos sean llevados ante la justicia
