El martes, las autoridades descubrieron el cuerpo de un hombre cubano de 31 años que fue asesinado en una vivienda en el municipio Colón, en la provincia de Matanzas. La víctima, conocida como «El Águila», había estado desaparecida por tres meses antes de ser encontrada en la calle Maceo entre Eusebio Hernández y Varona.
Según una fuente anónima, la víctima había sido descuartizada y arrojada a la fosa de la casa de su abuelo. Los presuntos asesinos incluyen a dos primos y un tío del hombre asesinado, quien tenía cinco hijos y se dedicaba a la venta de ajo y cebollas.
Aunque hay rumores de que la víctima tenía una mala conducta y había sido denunciada por golpear a su abuelo, la fuente opina que eso no justifica matarlo. La policía y los bomberos tuvieron que trabajar arduamente para encontrar y sacar el cuerpo de la fosa.
El padre de la víctima ejerció presión sobre el abuelo para que revelara dónde había sido arrojado el cuerpo. En este momento, los implicados en el asesinato están en prisión.
El trágico crimen se suma a otros casos de violencia reciente en Cuba, incluyendo el asesinato de Guperto Rafael Cánovas Adán, un taxista camagüeyano que fue encontrado muerto después de varios días de desaparecido, y la muerte de Yudel López Álvarez, quien fue apuñalado y descuartizado por dos sujetos que querían robarle un triciclo eléctrico.
En general, ha sido un año difícil y violento para Cuba, y esperamos que las autoridades tomen medidas para abordar la creciente ola de violencia en el país.