Recientemente, en la provincia de Cienfuegos en Cruces, una joven de 18 años, Yoilén Acosta Torriente, fue asesinada y tres sospechosos han sido detenidos como parte de la investigación del crimen.
Según La proa del Centro, los sospechosos son Yarelkui Aguilar y su pareja Asniel Chao, así como Rafelito Álvarez Hernández, un vecino cercano a los otros dos.
La última vez que Yoilén fue vista con vida fue en la noche del 29 de enero, cuando salió de su casa en una bicicleta para hacer algunas gestiones. Sin embargo, apareció muerta el día primero de febrero en un campo de cañas cerca de Tumba Saco.
La policía detectó a los sospechosos después de revisar la base de datos de ETECSA y rastrear las últimas llamadas realizadas a su teléfono.
Según La Proa, Yoilén planeaba regresar de su mandado para irse más tarde a la discoteca del pueblo, pero no fue posible debido a una de las llamadas que vinculan a los sospechosos con su muerte. Después de asesinarla, los perpetradores quemaron su cuerpo en el cañaveral para borrar cualquier signo que pudiera delatar a los autores del crimen.
La pareja formada por Yarelkui Aguilar y Asniel Chao es conocida por tener una mala reputación y estar mezclados en casos de proxenetismo y otros negocios turbios. Yoilén trabajó durante algún tiempo para el gobierno de Cruces, mientras que Chao tiene un amplio historial delictivo y su hermano fue condenado por asesinato.
Rafelito Álvarez Hernández, el tercer sospechoso, es identificado como el principal autor del homicidio por La Proa, aunque aún deberá ser comprobado en las investigaciones en curso. Además, se sabe que Álvarez tiene un historial de maltratador y abusador de mujeres y ha estado en prisión por amenazas y agresiones.
A pesar de que los sospechosos han sido detenidos, la investigación se mantiene abierta y se espera descubrir más información sobre su vinculación con la víctima.