Un trágico naufragio ocurrido el pasado 23, luego que un grupo de balseros cubanos salieran desde las costas de Cárdenas, Matanzas, ha dejado al menos cinco muertos y 12 desaparecidos.
Entre los sobrevivientes se encuentra Yaylin Mesa Vázquez, quien ha compartido en Facebook un conmovedor testimonio sobre su experiencia y su dolor por la pérdida de su hermana mayor y amistades.
En su publicación, Yailyn suplica que la búsqueda de sobrevivientes no se detenga y cuestiona la decisión de los guardacostas de parar la búsqueda después de 48 horas.
Tras ser rescatada junto a otra joven por un barco de pescadores en lugar de guardafronteras como se había dado a conocer, también pide a las autoridades que hagan bien su trabajo y sigan buscando en los cayos cercanos.
Es importante destacar que muchas familias aún están esperando noticias de sus seres queridos y que el gobierno cubano ha confirmado la cifra de cinco muertos y 12 desaparecidos.
Lanzarse al mar en embarcaciones de precarias condiciones es una práctica muy peligrosa y puede tener consecuencias mortales. Estas embarcaciones suelen ser construidas con materiales de baja calidad y sin cumplir con las regulaciones de seguridad establecidas, lo que las hace particularmente vulnerables a problemas técnicos y a los elementos del clima. Además, muchas veces estas embarcaciones son sobrecargadas y están dirigidas por personas con poca o ninguna experiencia en navegación.
Los balseros cubanos tras salir de la Isla se enfrentan al peligroso Estrecho de la Florida, conocido por ser una de las zonas más traicioneras del mundo para navegar debido a las fuertes corrientes, las tormentas repentinas y las olas grandes que pueden generar.
El uso de embarcaciones de precarias condiciones y el intento de cruzar el Estrecho de la Florida son acciones altamente peligrosas y pueden tener consecuencias mortales. Es importante que las personas eviten tomar decisiones apresuradas y que siempre busquen una forma segura y legal de viajar.
En numerosos comunicados en redes sociales, la Guardia Costera de Estados Unidos ha explicado que la búsqueda de una vida mejor no es una excusa para poner en riesgo su propia vida y la de otros.