Los dulces, como se llaman en Cuba, son una manera de conservar los alimentos y en este caso las frutas. Antiguamente se confitaban muchos productos, unos en almíbar y otros en manteca. Las masas de cerdo se cocinaban en manteca hasta que perdieran la humedad y se podían guardar todo el año en un recipiente tapado, las frutas de temporada se consumían todo el año; las tajadas de mango, los cascos de toronjas, el tomate y el más apreciado, los cascos de guayaba. Todas estas recetas y otras muchas más las puedes encontrar en el Gran Libro de la Cocina Cubana en Amazon Libros.
Ingredientes:
- Guayabas pintonas 4 libras
- Azúcar blanca 3 tazas
- Sal pizca
- Canela 2 ramas
- Agua la necesaria
Elaboración:
Lavar las guayabas y separar aquellas que estén golpeadas o demasiado maduras. Pelarlas con cuidado de separar solo la cáscara fina. Cortarlas por la mitad y con una cucharita sacar la pulpa y las semillas a cada mitad de guayaba. (Con esas pulpas y semillas y con las guayabas golpeadas y muy maduras que separó antes, puede hacer jugo o mermelada).
Echar los cascos de guayaba en agua suficiente para cubrirlos y añadir canela en rama, dejar hervir a candela media hasta que estén medio blandos. Entonces añadir una taza de azúcar por cada libra de guayaba, puntear de sal y dejarlos hervir destapados a candela mediana hasta que estén completamente blandos y el almíbar se vea un poco espeso.