Los cubanos son creativos, y algunos dicen que no dominamos al mundo porque llevamos más de 60 años bajo el yugo de la dictadura. Quizás estos cubanos de los que hablaremos hoy son una muestra de ello, pues con sus propias manos, y utilizando materiales rústicos, armaron un pequeño bote artesanal para escapar de la isla hacia los Estados Unidos.
En las redes sociales circulan las fotografías, al parecer publicadas por los mismos creadores de esta embarcación luego de su salida del país, donde puede verse el proceso de fabricación.
Utilizando laminas de metal, un pequeño motor y espuma de poliuretano, una especie de espuma expansible que se utiliza habitualmente en trabajos de albañilería para rellenar huecos, sellar puertas y ventanas, o para aislar las casas del frío.
Palos, puntillas viejas, remaches y mucha inventiva… no necesitaron más para su bote; armada al parecer en una especie de finca, alejada de la vista de los «chivatones» que podían haber hecho fracasar su plan.
No es la primera de estas embarcaciones que conocemos, pues la imaginación de los cubanos para escapar del país les ha hecho utilizar hasta automóviles completos para lograr su objetivo.
Los intentos de ciudadanos cubanos por llegar a EE UU tanto por tierra como por mar se han incrementado de manera significativa desde 2021.
Desde el 1 de octubre de 2021, cuando comenzó el actual año fiscal, más de 3.400 que viajaron por mar han sido detenidos.
Según el reporte del Servicio de Aduana y Protección Fronteriza de Estados Unidos, en el año fiscal que cursa desde el primero de octubre hasta el mes de junio, los oficiales de esa nación norteamericana se habían topado con más de 150.000 cubanos en los límites del país, una cantidad superior a toda la crisis migratoria del Mariel en 1980 cuando salieron 125.000 isleños.
