El origen de la palabra Habana, y por qué se escribe actualmente con B y no con V es algo que intriga a no pocos cubanos, mucho más cuando se sabe que en antaño el nombre de la capital se escribía con V. Es decir, Havana, como mismo se escribe en inglés.
En francés se escribe Havana y en italiano Avana; en todos con los casos con V, sin que nadie pueda explicar por qué en español es el único idioma en el que el toponímico se escribe con B. ¡Tronco de enredo de bes y uves!
A pesar que existen discrepancias sobre el nombre Habana, desde un principio se escribió con V. De acuerdo a los apuntes del historiador cubano Emilio Roig de Leuchsenring en su obra “La Habana: Apuntes Históricos”, uno de los pocos que conoció de primera mano el nombre geográfico, lo escribió siempre con V y o no con B.
Havana con V y no con B se encuentra escrito también en las Actas Capitulares del Ayuntamiento de la capital de Cuba. Estos documentos, son los más antiguos de carácter oficial que se conservan y que contienen el nombre de la villa.
Por su parte, Antonio Bachiller y Morales, en trabajo especialmente consagrado a esta materia dice, que el cronista Herrera asegura que Habana siempre se escribe con b, según aparece reflejado en la página 218, de sus Décadas, editado en 1730.
No fue hasta principios del siglo XIX, luego de haber estado escribiéndose durante más de 300 años con V, que comenzó a predominar la escritura de Habana con B. Luego de 1821, en todas las Actas Capitulares de la capital cubana comienza a escribirse “Habana”, y desde entonces siempre ha sido así.
El porqué del cambio nadie lo sabe a ciencia cierta, por lo que cada cual puede defender la hipótesis que mejor le parezca. Quizás, todo no fue más que algún escribano muy burro que metió la pifia y luego todos los demás lo copiaron. ¡Vaya usted a saber!