Es un secreto a voces que Cuba es un país marcado por la emigración. Históricamente, las personas se han marchado a otros sitios en busca de una mejor calidad de vida.
Tras el fin de la política de Pies Secos/Pies Mojados en el 2017, muchos cubanos tuvieron que quitar a Estados Unidos del primer puesto en la lista de los países a los que emigrar y han estado buscando alternativas desde ese entonces, sin llegar a pensar en lengua, clima o religión.
A continuación, les mencionamos algunos de los países a los que muchos cubanos se han ido porque no les queda otro remedio.
1 – Surinam
Da igual que en Surinam se hable francés, neerlandés y creole, y que además posea una de las peores economías de América Latina. Los cubanos descubrieron esta opción y para allá se han ido muchos.
2 – Holanda
Al parecer Holanda se ha puesto de moda entre los cubanos y a pesar que el idioma es un impedimento y que allí si “chifla el mono”, no son pocos los que no pierden las esperanzas de poder establecerse en ese país.
3 – Serbia
Algunos cubanos llegaron a Serbia con la intención de seguir camino a algún país de la Unión Europea y luego buscar la forma de viajar a Estados Unidos. Las fuertes oleadas migratorias acabaron por complicarlo todo y no son pocos los isleños que se han tenido que resignar y pedir asilo político allí.
4 – Montenegro
Similar a lo que sucede en Serbia, muchos cubanos no han tenido otro remedio que pedir asilo allí e incluso vivir en campos de refugiados.
5 – Rusia
No importa si no les gusta la comida, cae nieve, o no entienden ni pitoche el idioma, si no exige visado a los cubanos entonces clasifica como posible destino a la hora de emigrar.
6 – República Checa
Dicen que la personalidad de los checos no lidia muy bien con la de los cubanos, pero lo cierto es que hasta allí están llegando los isleños en su afán de asentarse donde quiera que sea menos en su propio país.
7 – Ecuador
Anteriormente Ecuador era un punto de partida para la travesía hacia Estados Unidos. Ahora que esa ya no es una opción, los cubanos han comenzado a buscarse cartas de invitación o contratos de trabajo con tal de irse a vivir allí.