Cuando tenía unos 25 años, la actriz cubana Susana Pérez se ganó el derecho de realizar lo que sería su primer protagónico en una telenovela, lo cual la llevaría convertirse en una de las principales opciones a la hora de encarnar un papel de damita joven, entre quienes se encontraban a cargo de las adaptaciones literarias de gran prestigio en aquella época.
Tomando como base un relato de Cirilo Villaverde, La joven de la flecha de oro, contó con un elenco de puras estrellas, un vestuario espectacular y una cuidada escenografía que intentaba recrear al dedillo una época.
La joven de la flecha de oro permitió que muchos televidentes conocieran de la obra de Cirulo Villaverde, quien también había escrito otras estampas de la vida colonial además de la celebérrima Cecilia Valdés o la Loma del Ángel.
La telenovela abordaba el tema de una joven criolla que comprendía el amargo camino de la mujer en la sociedad cubana del siglo XIX. En el elenco de esta, resaltaban además de Susana Pérez, Yolanda Cuéllar, Yolanda Pujols, Rogelio Leyva , Cristina Palomino, Orlando Casín y Ana Luisa Rubio
Al parecer tanto audiencia como directivos del medio quedaron muy satisfechos al ver a Susana Pérez vistiendo ropa de época, ya que más adelante pudimos disfrutar de ella en esta faceta en otras adaptaciones literarias como El rojo y el negro (1979), Teresa Raquin (1980), Cumbres borrascosas (1981), Rosas a crédito (1983), y los dos momentos cumbre de su trayectoria en este tipo de telenovelas: Las impuras (1984) y Sol de Batey (1985).
Tan popular se volvió Susana Pérez que llegó a ganar en ese entonces el Premio Girasol de la popularidad, el cual era otorgado por la Revista Opina.
Tras este intenso período televisivo, Susana Pérez encarnaría no pocos papeles importantes tanto en el cine como en el teatro cubano, pero aquí lo que nos convoca es rememorar cuando era tan solo una joven actriz llena de talento y esperanzas, por allá por 1977 o 1980.