¿De dónde los cubanos sacan la ropa que visten?

Redacción

¿De dónde los cubanos sacan la ropa que visten?

Talleres o espacios donde se confeccionan uniformes, ya sean de escuela, militares, de centros de trabajo, etc. son los restos de la Industria Textil cubana que llego a ser una de las más profesionales en la época, denotada por el buen gusto para vestir de los cubanos en cada ocasión.

Llegados a un punto no solo se ha perdido la elegancia en cuanto a ropa sino que ha sido proporcional con la pérdida también de los modales de los ciudadanos. No es nada raro acudir a un teatro, cine, restaurante e incluso al trabajo con ropa inadecuada, a tal punto que en la mayoría de los lugares existen señaléticas prohibiendo la entrada al centro si no es con la ropa apropiada.

Las posibilidades de adquirir indumentaria pueden variar de acuerdo a su costo, por ejemplo las ropas que se hallan a precios más asequibles para la población son compradas en otros países e incluso donadas y se ofertan en establecimientos estatales de moneda nacional, muchas veces esta se encuentra amontonada en un rincón, dentro de cajas o colgada en percheros, que aunque posean los mejores precios, varias de ellas están en mal estado, de ahí las numerosas quejas del comprador.

Subiendo un poco el presupuesto están las que se comercian en divisa por las tiendas del Estado, las cuales dejan que desear, pues no son piezas que vayan a la moda, poseen estilos repetidos y se podría decir que no son de muy buena calidad, de ahí que no tengan tanta demanda.

No podrían faltar las boutiques que aunque si ofertan vestimenta y calzado de marcas internacionales reconocidas, los precios son muy elevados de acuerdo al poder adquisitivo de la población, por lo que llegan a deteriorarse en los maniquíes y vidrieras ya que no se llegan a vender.

Por otro lado la Aduana pone una traba tras otra a las personas que tienen intenciones de importar producto proveniente de Panamá, México, Estados Unidos, etc. pues llegan a ser mucho más demandados por las personas, por su buena, o vamos de decir mejorada, relación calidad-precio, y así se evitan una competencia.

Debido a todo esto ciudadanos como Salvador Valle de 26 años expresan que ir bien vestido es un lujo que no todos se pueden permitir por los altos costos de la ropa de calidad en las tiendas estatales “un jean cincuenta USD” “unos tenis Adidas setenta USD” y el salario 2500 pesos cubanos, he ahí la cuestión: ¿vistes o comes?