Sabemos que el problema del transporte es algo serio en Cuba, por eso, quizás te este pensando en llevarle una moto eléctrica a tus familiares durante tu próximo viaje a la Isla. Aquí te explicamos todo lo que debes saber sobre la Aduana, desde su costo por entrarla hasta las características que debe tener para que no te arriesgues a que te la decomisen.
De acuerdo a la Resolución 10-2007 de la Aduana General de la República y su actualización en la Resolución No. 143-2013, se permite la importación de ciclomotores con motor de propulsión eléctrica, que pueden ser lo mismo bicicletas eléctricas que motorinas con baterías eléctricas.
En ningún caso se permitirá la entrada de ciclomotores con motor de combustión interna (gasolina o diesel), independientemente de la cantidad de cc de su motor o la velocidad máxima que alcanzan.
La importación de motos eléctricas, también conocidas como ciclomotores, se permite siempre que su potencia no exceda los 1000 (mil) watts y su velocidad máxima no sea superior a los 50 Km/h.
Para comprobar las características del ciclomotor se debe presentar el manual contentivo de los datos técnicos antes señalados, pues en ocasiones los velocímetros que traen muestran velocidades máximas superiores a las que el ciclomotor puede realmente alcanzar de acuerdo a sus características técnicas de fabrica.
Asimismo, su capacidad de transportar personas no puede exceder las dos plazas y no puede tener capacidades adicionales para transportar ningún tipo de carga.
La cantidad máxima permitida de estos vehículos en total, en cada viaje, no puede superar las dos unidades. Además ten presente que el valor en aduanas de cada uno es de 200 pesos (puntos).
Lo más común es que estos vehículos se importen como parte de un Equipaje No Acompañado (ENA). Sin embargo, por su valor en aduanas, un ciclomotor eléctrico puede ser importado como Envío. Aunque, en este caso, el destinatario en Cuba tendría que pagar 170.00 CUC como derechos de aduanas, más los costos de la Agencia Transitaria por concepto de transportación.
Las leyes aduanales de Cuba reconocen a los pasajeros también el derecho a la importación al país de patinetas y carriolas eléctricas, siempre que estas cumplan con las limitaciones de velocidad y potencia que se aplican a todos los ciclomotores cuya entrada se admite en la Isla.