Tras más 60 años del triunfo de la Revolución en Cuba, encabezada por Fidel Castro, cada vez son menos los hombres que se mantienen vivos de los que lo acompañaron durante el enfrentamiento a Fulgencio Batista. De ellos, muchos menos los que se mantienen cerca de las mieles del poder todavía menos. Estos son los tres «grandes» que aún mueven los hilos de la política en la Isla…
Raúl Castro Ruz (Birán, Oriente, 1931): El menor de los hermanos Castro y, quien luego de ceder la presidencia del país a Miguel Díaz-Canel, es considerado todavía como el hombre más poderoso de toda la nación. Mantiene el cargo de Primer Secretario del omnipotente Partido Comunista de Cuba.
Desde siempre fue la mano derecha de su hermano mayo Fidel, a quien acompañó en el Moncada, en la expedición del yate Granma y en la guerra en las montañas contra el gobierno de Batista.
Al triunfar la revolución se convierte en Ministro de las Fuerzas Armadas, cargo que mantuvo hasta asumir la presidencia.
Una vez en el poder inició una reforma económica de tipo aperturista y una política exterior más pragmática que llevó a un entendimiento con el Gobierno de Barack Obama y el restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos.
Ramiro Valdés Menéndez (Artemisa, 1932): El hombre de confianza de los hermanos Castro. Ramiro participó también en los sucesos del Moncada y fue expedicionario del Granma. Luego de triunfo revolucionario en 1959, pasó a desempeñarse como organizador de los órganos de Seguridad del Estado cubano entre 1961 y 1968 y de nuevo su jefe entre 1979 y 1985, lo que demuestra la incondicionalidad que siempre vieron en él sus jefes Fidel y Raúl.
Hombre de pocas palabras y hablar pausado el Gobierno de La Habana ha confiado siempre en él para las misiones más delicadas. Por eso no extraña que haya sido el elegido entre los “históricos” para estar bien cerca del nuevo Consejo de Estado electo en abril.
José Ramón Machado Ventura (Vueltas, 1930): Médico de profesión se le considera el ideólogo principal del Partido Comunista de Cuba desde la muerte de los viejos comunistas del PSP. Aunque salió del Gobierno en las últimas elecciones, mantiene su cargo de Segundo Secretario del poderoso Partido Comunista de Cuba.
Sin el “aval” de otros guerrilleros de la Sierra Maestra (no estuvo entre los asaltantes al Cuartel Moncada ni entre los expedicionarios del Granma y tampoco obtuvo el grado de comandante en la guerra), Machado Ventura llegó mucho más lejos que la inmensa mayoría de sus compañeros y tras la caída de los que se consideraban el “relevo histórico” se alzó con el cargo de primer vicepresidente del Consejo de Estado aupado por Raúl Castro.
Se considera uno los ortodoxos dentro de los que disfrutan del poder en Cuba y muchos analistas lo han considerado como el principal freno a las reformas de Raúl Castro. Sin embargo, nunca se ha negado a cumplir ninguna orden directa del menor de los Castro, ni ha expresado públicamente ninguna opinión divergente con él.