Todos conocen la famosa Base Naval de Guantánamo, uno de los puntos de fricción más agudos entre los gobiernos de Estados Unidos y Cuba. Pero, ¿sabe usted que los norteamericanos estuvieron a punto de poseer en la Isla, no una, sino cuatro bases militares? Aquí le contamos.
Al terminar la Guerra Hispano – Cubano – Norteamericana y ser ocupada Cuba por el ejército de Estados Unidos, el Gobierno del Norte le impuso a la Isla la aceptación de la Enmienda Platt; so pena de no retirarse si los constituyentes cubanos no la aceptaban. En uno de sus acápites los estadounidenses demandaban que el futuro Gobierno de Cuba debía vender o arrendar a los Estados Unidos las tierras necesarias para la instalación de carboneras o estaciones navales en ciertos puntos determinados.
Estas bases eran muy importantes para los estadounidenses, pues estos puntos de aprovisionamiento les permitirían defender de forma mucho más efectiva el Canal de Panamá que en esos años estaban construyendo.
A pocos meses de instalado el Gobierno de Tomás Estrada Palma, en noviembre de 1902, el Departamento de Estado le hizo llegar la exigencia de cesión de cuatro de las más importantes bahías de Cuba: Guantánamo y Cienfuegos en la costa sur y Nipe y Bahía Honda en el litoral norte.
Comenzó entonces una batalla diplomática muy bien librada por los cubanos en la que el Gobierno de la Isla consiguió que Estados Unidos renunciara a las bahías de Nipe y Cienfuegos y se conformara sólo con Guantánamo y Bahía Honda. También logró la diplomacia cubana que los territorios no fueran “vendidos” o “cedidos” sino sólo arrendados; aunque tuvo que ceder en que dicho arriendo se efectuara a perpetuidad.
En 1912 el Gobierno de Estados Unidos renunció a sus derechos sobre Bahía Honda a cambio de la ampliación de los terrenos de la Base Naval de Guantánamo, que todavía ocupan.