Las autoridades de México devolvieron este miércoles a La Habana un grupo de 74 migrantes irregulares cubanos que fueron detenidos en ese país cuando intentaban ingresar ilegalmente a Estados Unidos, informaron medios estatales.
El grupo que llegó al aeropuerto habanero José Martí está compuesto por 46 hombres y 28 mujeres que habían salido legalmente de la isla caribeña con destino a terceros países para seguir la ruta hacia territorio estadounidense, detalla un reporte de la estatal Agencia Cubana de Noticias (ACN).
En lo que va de este año, 1.005 migrantes irregulares han regresado a Cuba a través de 22 operaciones, por vía aérea y naval.
De las personas retornadas, 581 llegaron de México, 43 de Bahamas y 381 fueron interceptadas por los servicios de guardacostas de los Estados Unidos.
Las autoridades migratorias cubanas perciben un aumento de la presión migratoria, ya que en los dos primeros meses del año se han registrado más del 43 % de todos los migrantes devueltos en 2021.
Además, insisten en advertir los peligros que implican estos viajes en los cuales las personas se exponen a posibles actos de violencia, extorsiones, y otros riesgos.
La cantidad de cubanos en la frontera de México con Estados Unidos aumentó a finales de 2021 de 862 en agosto a 7.893 en diciembre, según la Oficina de Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA).
El Gobierno cubano, por su parte, culpa del aumento de la migración irregular a las medidas que han reforzado el embargo económico que aplica EE.UU. a la isla, al incumplimiento de los acuerdos migratorios que establecen la entrega de 20.000 visas anuales y a su política de negar o limitar los permisos de viajes a los ciudadanos cubanos.
Asimismo, denuncia la vigencia de la Ley de Ajuste Cubano de 1966, que permite a los cubanos solicitar la residencia permanente al año y un día de permanecer en territorio estadounidense.
La suspensión del procesamiento y otorgamiento de visas de inmigrante y de no inmigrante en el Consulado estadounidense en La Habana y el traslado de estos trámites a terceros países han fomentado asimismo las salidas ilegales, según el Gobierno cubano.
Estados Unidos redujo en 2017 al mínimo la actividad y el personal de su Embajada en La Habana y desvió los servicios consulares a terceros países después de los «incidentes de salud» contra sus diplomáticos, que aún no han sido aclarados.
El pasado 3 de marzo, EE.UU. informó que se reanudará la emisión de visados de migrantes en La Habana tras un parón de cuatro años, dentro de la «expansión paulatina» de la actividad consular, aunque de forma «limitada» y sin precisar fecha.