Zonas Congeladas, aquí ni se vende ni se permuta sin permiso del Gobierno cubano

Redacción

Zonas Congeladas, aquí ni se vende ni se permuta sin permiso del Gobierno cubano

Una pequeña placa de aluminio se colocó en muchas puertas de Cuba tras el triunfo de la Revolución en 1959. La misma, contenía el mensaje “Esta es tu casa, Fidel”, a modo de demostrar la lealtad al nuevo gobierno.

Al cabo del tiempo, muchos comenzaron a retirar la plaquita rojinegra de la entrada de sus viviendas porque se dieron cuenta que a Fidel Castro no se le podía ofrecer nada que no se hubiese cogido ya y comenzaron a emigrar a los Estados Unidos.

Por aquel entonces, el máximo líder cubano organizó el Consejo Nacional de la Reforma Urbana y comenzó a confiscar todas las viviendas que habían quedado vacías. Aunque dicho Consejo tenía un cuerpo colegiado de abogados, era dirigido en realidad por la difunta Celia Sánchez, la secretaria de Fidel Castro, quien rápidamente se encargó de la parte que le interesaba al Jefe.

De esta forma nacieron las llamadas «zonas congeladas», donde residirían solamente personas fieles al gobierno. En un primer momento fueron tres.

La primera comprendía desde la Avenida Paseo y 17 hasta la calle 11 y 26, en El Vedado y el reparto conocido como Nuevo Vedado, donde Fidel Castro se hizo con un inventario de unas 500 mansiones que luego fueron entregadas como premio a sus oficiales más fieles.

La segunda de estas zonas congeladas era lo que se conoce como Miramar, abarcando desde la costa hasta la calle 7ª, y desde el Túnel hasta la calle 94.

La tercera y quizás la más importante, abarcaba los distinguidos repartos Country Club, Biltmore y Alturas de Biltmore, amén del segmento conocido como la Playa de Viriato. Actualmente, parte de esta zona congelada conforma el más exclusivo sector residencial de los fieles del Gobierno, donde se encuentra Punto Cero, conocido por ser la vivienda donde vivió Fidel junto a su familia hasta su muerte.

Esta situación se mantuvo durante casi medio siglo hasta que Raúl Castro asumió las riendas del país y comenzó a introducir algunas reformas económicas para hacer más potable su estancia en el poder. Entre estas, destacan las referentes a la propiedad de las viviendas y la creación de algunas inmobiliarias que, aún con más penas que glorias, han estado operando durante los últimos años.

Las zonas congeladas aún existen, pero ahora con algunas más libertades con respecto a la venta de casas, sobre todo en Nuevo Vedado y Miramar, porque con respecto a la tercera zona, todo sigue igual.

Para los propietarios de viviendas en estas zonas el llevar a vivir a algún miembro de su familia trae consigo que deban realizarse no pocos y rigurosos trámites.

Existen incluso algunas zonas congeladas más exclusivas que otras. Comparemos el reparto Kholy, en Nuevo Vedado, donde viven dirigentes de mediano rango y sus familias, además de las personas que habitan en algunos edificios de microbrigadas, que, por supuesto son “confiables”, con el reparto Siboney (los otrora Biltmore y Country Club), donde se encuentra el famoso Punto Cero.

El acceso a este lugar es prohibido en su totalidad. Sus entradas se encuentran bajo custodia militar permanente. Las lujosas residencias abarcan hasta media manzana y cuentan con piscinas, canchas para deportes y otras comodidades.

Durante la etapa republicana, vivían allí personas que poseían algunas de las fortunas más grandes del país, pero tras la llegada de Fidel al poder, aquellos ricos fueron suplantados por otros nuevos que, curiosamente, tampoco quieren codearse con la plebe.

El Gobierno justifica que se trata de «zonas con regulaciones especiales», alegando que existen en estos barrios «intereses históricos, económicos, de la defensa, la seguridad y el orden interior».