Los cubanos que ingresaron a Estados Unidos tras el fin de la política de pies secos/pies mojados y pidieron asilo podrán solicitar la residencia permanente, de acuerdo con un anuncio del Servicio de Inmigración y Ciudadanía de EEUU, UCSIS (por sus siglas en inglés).
El anuncio en un primero momento aplica a las personas que entraron al país presentándose en uno de los puentes fronterizos y salieron en libertad con una I-220A y no para quienes cruzaron el río o el muro, de manera ilegal.
Se trata del dictamen final de una demanda colectiva encabezada por el abogado Mark Prada, que inició desde finales del 2020. La abogada Claudia Cañizares también forma parte de la demanda y festejó en sus redes sociales el anuncio.
La medida favorecerá a nacionales cubanos que entraron al país entre el 12 de enero del 2017 y el 17 de noviembre del 2021.
Además, que hayan sido registrados por las autoridades migratorias con un permiso de libertad bajo supervisión, conocido como I-220A y que cumplan los siguientes requisitos:
“Que no hayan salido del país, que aplicaron al ajuste (cubano) y fueron denegados, que fueron soltados de una detención por ICE y no por un juez de inmigración, y que son ‘Arriving Aliens”, dijo el abogado Mark Prada.
Se estima que puedan acceder a la residencia permanente unos 40,000 cubanos de los más de 95 mil que han entrado irregularmente a Estados Unidos por la frontera mexicana.
“Básicamente están ayudando a la gente que pueden proceder en una corte federal y el resto necesita pelear en los tribunales de inmigración”, explicó el abogado Prada.
Sobre si también las personas que hayan llegado después del 17 de noviembre del año 2021 pudieran beneficiarse de esto o no, el abogado respondió que en la practica la gente puede aplicar y deben ser aprobados, pero habría que esperar.
Sobre si el este anuncio beneficiaría a los cubanos o a otros grupos poblacionales , el experto dijo que “este aviso es específicamente a este grupo de cubanos, pero los argumentos que hemos hecho deben aplicar a cualquier persona que esté en la misma posición”.
Según los expertos, otras personas que fueron dejadas en libertad después de entrar por la frontera o tras ser interceptados en el mar, también pudieran encontrar una vía legal para pedir la residencia permanente en los Estados Unidos.