Para muchos es desconocido que, dentro de las fronteras de Cuba, existe una comunidad musulmana que ha ido en ascenso en los últimos años. Aun cuando en la Isla se practican al menos 40 religiones diferentes, esta comunidad recibe nuevos adeptos cada mes.
El 17 de junio del 2015 fue inaugurada la mezquita Abdallah en el centro histórico de La Habana. Muchos de los jóvenes que la visitan han emigrado de otros credos, aunque una buena parte ha dado sus primeros pasos en la fe del Islam porque se han sentido motivados a convertirse en musulmanes por otras cuestiones personales.
Actualmente acuden a esta mezquita unos 150 musulmanes, entre los que se incluyen mujeres, hombres y niños.
Resulta curioso para los musulmanes cubanos como los vecinos observan sus vestimentas religiosas tradicionales, sin embargo, no lo sienten como algo negativo, ya que tampoco parece ser un problema, para los cubanos en general, contar con la presencia de una mezquita en la localidad, ya que estos se muestran comprensivos con la existencia de una gran diversidad religiosa en la isla.
Según consideran varios expertos, la fe en el islam no es un fenómeno nuevo en Cuba, ya que está había sido introducida al país a través de estudiantes musulmanes que ingresaron al país en las décadas del 70 y 80.
La comunidad musulmana de Cuba no está exenta de experimentar ciertas dificultades, especialmente a la hora de respetar tradiciones como el ramadán, donde se debe romper el ayuno con dátiles, y este resulta ser un fruto realmente difícil de encontrar en los supermercados de la isla.
Adaptarse al Islam es un cambio significativo para los cubanos, la mayoría de los cuales creció comiendo carne de cerdo y viendo consumir alcohol.
En Cuba el desabastecimiento se hace sentir en no pocos sectores, siendo la alimentación uno de los más sufridos. Si no se encuentran naranjas, plátanos y muchas otras frutas mucho más comunes, imagínese usted los dátiles.
En toda Cuba se contabilizan más de 13.000 musulmanes, de los cuales apenas poco más de mil son cubanos convertidos. Los seguidores del islam en la nación caribeña se encuentran diseminados por todo el país, aunque La Habana, Santiago de Cuba y Camagüey, son las provincias que agrupan a un mayor número de fieles.
Los musulmanes son el grupo religioso que más crece en el mundo, según el Pew Research Center, que considera que aumentarán un 73% para 2050. En Cuba aún pueden parecer invisibles.
