En cualquier sitio que esté un cubano, la cubanía no lo abandona. Da igual el clima, la lejanía o la cultura del país en que se encuentre, las raíces no se dejan atrás nunca.
Sin embargo, en ocasiones nos tropezamos con algunos cubanos que han ido olvidando sus orígenes y poco a poco dejan de sentir y amar las cosas de la tierra que los vio nacer.
A continuación, te mencionamos algunos de los síntomas que presentan los que han comenzado a perder tu cubanía.
1 – Comienzas a detestar las fiestas familiares y de amistades cercanas: El cubano adora las reuniones familiares, ya que para él compartir lo poco que se tiene constituye un placer. El más sencillo de los platos sabe mejor si la compañía es buena.
2 – Empiezas a darle más valor a los bienes materiales que a tu propia familia: Los cubanos han vivido durante años sumidos en no pocas necesidades, pero al salir del país, en buena parte de los casos, lo hacen con la idea de poder ayudar a que sea mejor el futuro de los suyos. Entre los cubanos es impensable darse un lujo sin pensar en los seres amados que dejamos atrás. Es por esto que cualquier bien pierde importancia si no podemos disfrutarlo junto a nuestros seres queridos.
3 – No extrañas cosas como bañarte en el aguacero o los piropos: La personalidad de los cubanos es tan especial que, aun estando rodeado de personas de otro país, lo más probable es que te sientas solo si no tienes cerca a alguien que piense y actúe a lo cubano. En las calles esperas escuchar los piropos del mulato alto y o del pequeñito, el saludo de beso y abrazo, y oír “mi hermano estás perdido… si esto ya no lo extrañas, mala señal.
4 – Solidaridad: El cubano es solidario por naturaleza y se preocupa por los demás ya sean coterráneos o no. Dormir en un hospital al lado de un vecino enfermo, preparar una comida solo porque a un amigo que viene a visitarte le gusta o compartir lo que sea que tengas, son solo algunas de las cosas que caracterizan a los cubanos. Si ya no piesas así, es muy posible que hayas comenzado a perder tu identidad.
5 – No reírte ante las adversidades: El cubano es único, ya que su sentido del humor logra superar cualquier penuria que pueda presentarse. Incluso en los momentos más difíciles los cubanos tienden a mostrar su mejor cara y logran que la situación sea más llevadera si se echan unas sonrisas.
6 – Perder las ganas de bailar y fiestar: Ponerse a bailar en cualquier ocasión que lo permita, aunque se haya nacido “con dos pies izquierdos”, es típico de los cubanos. Basta que suene un poco de música para que al menos comiencen a mover el pie para seguir el ritmo. Si ya no sientes eso, estás perdiendo lo que te hace originario de Cuba.
¿Conoces alguien que perdió la cubanía?
