Antes de 1959 en Cuba los colegios privados se caracterizaban por la calidad de su claustro de profesores y por el alto nivel de preparación con que sus alumnos culminaban los estudios en el centro. Además estos colegios destacaban por estar ubicados en edificios extraordinarios que inevitablemente llamaban la atención de todo el que los veía. Con estas características existieron tres centros en La Habana, El Nuevo Colegio de Belén en Buena Vista, Colegio de los Hermanos de la Salle y el Colegio de las Escuelas Pías de Guanabacoa, reconocidos por su excelencia, aunque recalcar que solo podían asistir estudiantes varones. En esta época coexistían los colegios públicos y privados.
Nuevo Colegio de Belén en Marianao
Aunque conocido por estar emplazado en Buena Vista, lo que es hoy municipio Marianao, el primer Colegio de Belén estuvo ubicado inicialmente en el centro de La Habana, más específicamente en calle Compostela entre Acosta y Luz durante el período de 1854 hasta 1925.
Luego este pasa a Buena Vista en el municipio Marianao donde se construyó una instalación de acuerdo a un sistema educacional más moderno, sin escatimar en gastos, pues ya en el Belén de La Habana no se podían satisfacer las demandas educativas que requerían. Este nuevo colegio pasó a ser el preferido de las personas adineradas pues contaba museos, laboratorios equipados con todos los artefactos necesarios, numerosas bibliotecas, gabinetes y además ostentaba de un prestigioso claustro de profesores de renombre.
Construido sobre una altiplanicie y alejado de la tormentosa urbanidad, el centro poseía nueve pabellones y sobre uno de ellos había un observatorio meteorológico con tecnología de punta para esos tiempos, además poseía enormes corredores y patios para jugar al aire libre.
Los alumnos que decidieran internarse tenían a su disposición unos dormitorios brillantes por su buena decoración y lo limpios que se encontraban. Definitivamente el Nuevo Colegio de Belén de Buena Vista fue un centro de gran prestigio que además de la buena educación que proporcionaba, sus instalaciones fueron impresionantes.
Colegio de los Hermanos de la Salle en El Vedado
El colegio Hermanos de la Salle tuvo su primer centro ubicado en el municipio Vedado a las cercanías de la capilla del Carmelo, este se funda en 1905 y era de carácter laico-religioso por lo que constituyó el primero de su tipo. A pesar de que se encontraba amparado por el que era en esos tiempos el Obispo de La Habana, Pedro González, y el carácter que poseía, los estudiantes no podían optar por llegar a ser sacerdotes. Llegados a 1912 comienza a formar parte del Instituto de segunda enseñanza de La Habana y en 1921 se reubican en calle C y 21, Vedado en lo que sería parte del terreno de la Parroquia de este municipio.
Las instalaciones contaban con un laboratorio de física, por lo que constituyeron los primeros en poseer uno de su tipo que fuese específicamente para impartir clases y además poseían un museo de ciencias naturales con la historia de la propia naturaleza.
Una de las acciones populares más destacadas que realizaron fue que a pesar de ser un colegio privado, impartían clases a alrededor de 200 alumnos de manera gratuita, especialmente dirigidas por los hermanos de la Salle, a pesar de que fuesen ajenas al centro. También fueron los primeros en realizar un concurso de gimnasia en una escuela, que contó con todo el alumnado y esto fue producto de que impartían Educación Física a todos de manera obligatoria.
Hermanos de la Salle disfrutaba de sus propios libros, los cuales publicaban ellos mismos y que además otras escuelas tanto públicas como privadas también usaron por su calidad y fácil comprensión.
En cada una de las provincias de Cuba existían escuelas similares a esta, que además presentaban el mismo rigor académico.
El Colegio de las Escuelas Pías de Guanabacoa
El Colegio de las Escuelas Pías de Guanabacoa, más conocidos como los Escolapios de Guanabacoa, se funda en el siglo XIX, y se encontraba ubicado en el punto alto de la Villa de Guanabacoa. En este se impartían clases a la enseñanza primaria, Lenguas, Bachilleratos integrados con plástica-teatro-literatura o arte-música e incluso deportes, se impartía la enseñanza superior, Comercio con título de puerto mercantil, etc.
Como cumplía la función de internado, con todas las comodidades que requería el mismo, llego a alojar en sus habitaciones alrededor de 200 alumnos, e incluso más, que cabe resaltar solo podían ser varones, con aulas gratis para doscientos alumnos de primaria.
Su claustro de profesores estaba conformado por personas que eran maestros y sacerdotes a la vez y en los salones de clase estuvieron importantes personalidades de las artes, políticos y de las ciencias. Además fue uno de los centros que desarrollo numerosas actividades con gran iniciativa como choques deportivos, visita a lugares, excursiones e incluso se daban promoción por varios medios como revistas y boletines, por todas estas razones dicho colegio gozaba de un gran prestigio en la provincia.