El Pedraplén que enlaza Caibarién con Cayo Santa María, en la zona norte de la provincia de Villa Clara, ostenta el título de ser el más largo del mundo con sus 48 kilómetros de extensión.
Este Pedraplén permite la conexión con los cayos Las Brujas, Ensenachos y Santa María, mientras también facilita el acceso a pequeñas islas como Cobos, Fragoso, Majá, Francés, Las Picúas y Español de Adentro.
Este impresionante proyecto fue concebido con el propósito de realzar en Cuba destinos turísticos que fueran atractivos para los visitantes extranjeros. Se cuenta que, si se sumara el total de viajes necesarios para transportar las piedras a través de unos 48 kilómetros de mar, sería posible circunnavegar el mundo unas 650 veces.
La realización de este ambicioso plan demandó 68 camiones de volteo, además de topadoras frontales, compresores y cargadores. Sin embargo, diversas dificultades a lo largo de la construcción del Pedraplén extendieron el período previsto para su edificación, inicialmente estimado en 5 años, debido a la considerable reducción de recursos, especialmente el combustible. Finalmente, se completó en 10 años.
El proceso de construcción abarcó 7 años netos de labor continua, intercalados con pausas prolongadas y otras complicaciones materiales que generaron un retraso de dos años, con un costo total de 34 millones de dólares.
La grandiosa estructura fue diseñada de manera que las olas de 2 o 3 metros no puedan rebasar las piedras, incluso durante fenómenos como los huracanes que azotaron la isla en 2008, con vientos superiores a los 220 kilómetros por hora.
Con el propósito de preservar la flora y la fauna de la región, se evitó colocar rocas en las zonas de manglares y se erigieron 44 puentes, cuya construcción combinó hormigón in situ con componentes prefabricados.
Uno de los elementos más destacados de la obra es el puente sobre el Canal de los Barcos, el más largo de Cuba con 350 metros de longitud que atraviesa el mar. El entorno paisajístico es espectacular, especialmente cuando hay barcos pesqueros en la zona.
El Pedraplén Caibarién a Cayo Santa María recibió el «Premio Internacional Puente de Alcántara» en la VII Edición (1998-2000). Este reconocimiento se otorga en virtud de la valoración del jurado sobre la importancia cultural, estética, funcional y social de la obra, resaltando la calidad técnica y la perfección en la ejecución del proyecto.
