A lo largo de ayer lunes se armó un mega operativo con distintas dependencias de todos los niveles de gobierno en México, por una embarcación “pirata” que traía consigo a diecinueve balseros cubanos que se disponían a recalar en el puerto de Coatzacoalcos, Veracruz, pero un fallo en la estructura del navío provocó que estos quedaran a la deriva enfrente de la costa progreseña.
Se presume de manera extra oficial el grupo lo integraban cinco féminas y catorce hombres, de los cuales dos habrían perdido la vida por causas aún desconocidas.
El hallazgo fue hecho cerca de las nueve de la mañana por parte de una embarcación de navegación menor de pesca unas veinte brasas de dicho punto, por lo que estos pudieron ser quienes emitieron un aviso a la torre de control de la IX zona naval con base en Yucalpetén.
Lo anterior derivó en un constante movimiento a cargo de diversas unidades de dependencias como la Guardia Nacional, Semar, el gobierno del estado, entre otras, por lo que la alerta se desató entre la comunidad progreseña que incluso durante la mañana acudió a las afueras de la terminal remota a presenciar el movimiento.
Elementos del API que se encargan del monitoreo de entrada y salida de camiones de carga y descarga que pidieron anonimato por protocolos dentro de dicho organismo, expresaron que fue un buque salvavidas de los militares de la Secretaría de Marina quienes se encargaron de desembarcar a los cubanos para otorgarles atención médica de primer auxilio y luego trasladarlos en móviles terrestres del Instituto Nacional de Migración rumbo a un nosocomio de la capital yucateca pues varios presentaban deshidratación.
También desmintieron sobre la presencia de la Semefo dentro de la terminal remota, por lo que el par de presuntos cadáveres habrían sido trasladados en vehículos de otra institución o dependencia con el fin de ser llevados a la sede de alguna morgue para enviar los cuerpos a su lugar de origen.
A las once de la mañana un par de camionetas del INM se llevó a los cubanos rumbo a la ciudad de Mérida para iniciar su deportación. Una unidad no tenía placas al frente, mientras que la otra portada la numeración NTC-67-99, ambas también portaban logotipos del gobierno federal y estaban blindadas con ventanas reforzadas con rejillas ante un posible intento desesperado de escape de los inmigrantes que vieron frustrado su intento de salir de la isla caribeña.
Destaca que el tema fue tratado con tanto hermetismo por las autoridades involucradas que incluso una patrulla de la policía municipal no obtuvo su respectivo acceso para acudir al movimiento que se originó en la terminal remota: “No tuvimos participación de ninguna clase, no nos dieron acceso a la terminal remota” expresó de manera breve Emilio Caamal Gutiérrez, comandante de la dirección de seguridad pública y tránsito.
Cabe mencionar que hasta el momento, no ha habido un anuncio oficial por parte de la Administración Portuaria Integral, por la Secretaría de Marina o el Instituto Nacional de Migración con sede en el estado para saber el estado en el que se encuentra el grupo de cubanos que intentó huir de la isla y los detalles correspondientes a su deportación.
