Estados Unidos condena “tácticas de intimidación” de Cuba antes de las protestas del 15 de noviembre

Redacción

Estados Unidos condena "tácticas de intimidación" de Cuba antes de las protestas del 15 de noviembre

El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, condenó el domingo lo que calificó de “tácticas de intimidación” por parte del gobierno cubano antes de las protestas previstas para el lunes en Cuba y prometió que su país aplicará medidas para “pedir cuentas” por la represión.

Los grupos de oposición han convocado la marcha para exigir mayores libertades políticas y la liberación de los activistas encarcelados, luego de las protestas callejeras de julio, las más grande en décadas.

El gobierno de Cuba ha prohibido la manifestación, diciendo que es parte de una campaña de desestabilización de Estados Unidos.

“Pedimos al gobierno cubano que respete los derechos de los cubanos, permitiéndoles reunirse pacíficamente (…) y manteniendo abiertas las líneas de Internet y telecomunicaciones”, dijo Blinken en un comunicado el domingo.

Blinken instó a los socios de Estados Unidos a imitar el apoyo de Washington a los manifestantes y prometió que Washington “continuará aplicando medidas que apoyen al pueblo cubano y promuevan la rendición de cuentas por la represión del régimen cubano”.

La administración del presidente Joe Biden impuso sanciones selectivas a funcionarios cubanos y a las fuerzas de seguridad luego de las protestas de julio.

El predecesor de Biden, Donald Trump, hizo retroceder un acercamiento histórico que su predecesor, Barack Obama, supervisó entre Estados Unidos y su antiguo enemigo de la Guerra Fría.

Biden, quien se desempeñó como vicepresidente de Obama, prometió durante la campaña electoral de 2020 contra Trump volver a comprometerse con Cuba.

Pero las tensiones han aumentado desde la dura respuesta del gobierno cubano a las protestas que estallaron en medio de una grave crisis económica y un aumento de las infecciones por COVID-19.

Miles salieron a las calles, enojados por la escasez de productos básicos, las restricciones a las libertades civiles y el manejo de la pandemia. Cientos de manifestantes fueron arrestados.

Blinken dijo que además de prohibir la marcha del lunes, el gobierno cubano “despidió a los partidarios de la oposición de sus trabajos y amenazó a los disidentes con encarcelamiento”. “Condenamos enérgicamente estas tácticas de intimidación”.