Un grupo de balseros cubanos rescatados por el crucero Scarlet Lady de Virgin Voyages en el Estrecho de Florida, que separa el estado del sur de Estados Unidos con Cuba, gritó con fuerza “Patria y Vida”, el lema de protesta utilizado en las manifestaciones contra el régimen castrista en la isla en julio pasado.
Haciendo honor a la tradición marítima de prestar ayuda a los marineros en apuros, el Scarlet Lady acudió al rescate el lunes pasado de una pequeña embarcación cubana que intentaba alcanzar las costas de Estados Unidos.
Tras hacer un anuncio, el capitán del buque dio la vuelta para ofrecer ayuda. Una vez que se acercó lo suficiente a la pequeña embarcación, los miembros de la tripulación subieron a los ocho a bordo del Scarlet Lady. Uno de ellos recibió asistencia médica en el crucero.
El capitán anunció luego que el Scarlet Lady se reuniría con el United States Coast Guard Cutter (USCGC) frente a la costa de Cayo Hueso para trasladar a los cubanos.
El derecho marítimo internacional establece que el capitán del buque tiene la obligación moral de prestar asistencia a las personas en peligro en el mar, sin tener en cuenta su nacionalidad, su estatus o las circunstancias en las que se encuentren.
La frase “Patria y Vida” pertenece a una canción que se convirtió en el himno de la resistencia contra la dictadura cubana, tanto para quienes habitan la isla como para los millones que han huido de ella. Esas tres palabras están cargadas de un valor simbólico que asusta al poder, sobre todo después de las multitudinarias protestas de julio. donde miles de personas salieron a las calles al grito de “libertad”. El régimen castrista advirtió luego que quien ose de pronunciar esas palabras será acusado de “instigador” y llevado a la cárcel.
La canción, que se estrenó en febrero de este año, es interpretada por por artistas como Yotuel Romero, Descemer Bueno, Gente de Zona, Maikel Osorbo y El Funky. La misma es es una contraposición a la consigna revolucionaria cubana “Patria o muerte”. En ella se alude a acontecimientos recientes como la protesta en noviembre pasado del Movimiento San Isidro, que acabó con el desalojo y detención de artistas y activistas encerrados en huelga de hambre en protesta por la detención del rapero contestatario Denis Solís.
