Aún no ha concluido las divergencias públicas entre Alexander Otaola y Manuel Milanés. La última jugada por parte del empresario fue dar un ultimátum al influencer.
Esta vez, al presentador del programa Hola Otaola le fue requerido que se retracte de todo lo que ha comentado en alusión al anfitrión de Un socio pa’ tu negocio y a la familia de este.
En relación a la demanda, Milanés comentó la posición de una tía en la isla, quien presuntamente trabaja en MEDICuba SA., una empresa del Estado cubano que sirve de cortina a las autoridades para el negocio de medicamentos en el mundo.
El Rey del Chisme respondió al ataque del empresario con toda una lista de motivos por los cuales no se iba a retractar ante su público. De igual forma, manifestó que Milanés hace una “vinculación histérica” de su persona con Rosa María Payá, a quien este también hizo un “llamado de atención”.
El youtuber afirmó que no tiene «que aclarar nada con Manuel Milanés”, alegando que Cuba Decide hace una buena labor y, por tanto, no tiene que cuestionarle nada a Cuba Decide y a su representante.
“Cuba Decide hace el trabajo que no haces tú Manuel Milanés, porque Rosa María Payá hace en el Parlamento Europeo y en los Foros Internacionales lo que tú no haces ni serás capaz de hacer”, afirmó.
El influencer, quien se ha mantenido trasmitiendo su programa por más de cinco años, consideró que la forma en la que el empresario se pronunció podría interpretarse de formas diferentes, lo mismo a nivel físico como a nivel conceptual.
“Yo lo puedo tomar como una amenaza física a mi persona por parte de Manuel Milanés que dijo: yo no juego y cuando juego, juego pesado”, esclareció.
Otaola insistió en reiteradas ocasiones al hombre de negocios que él no caería en retractación alguna, y que han existido varias oportunidades para dialogar, pero la cabeza pensante detrás del Consejo para la Guerra no supo defender su proyecto.
“Evidentemente Manuel Milanés o ha sufrido un cambio radical producto de algo que no sabemos, o está mostrando su verdadera cara”, indicó.
Las diferencias entre Otaola y Milanés comenzaron cuando el primero emitió su opinión del Consejo para la Guerra, considerándolo algo ilegal en sus inicios. Además, el presentador aboga por la lucha no violenta.