Luego de que el célebre actor cubano Enrique Molina falleciera hace una semana por complicaciones del coronavirus, el influencer Alexander Otaola arremetió contra el hijo del actor, Pavel, por esparcir las cenizas de Molina en el habanero río Almendares, tras recibir reacciones violentas del cubano.
El youtuber había recibido previamente una amenaza de Pavel Molina, y respondió cuestionando que cómo este iría a «partirle la cara» al cubanoamericano, cuando no fue capaz de comprar una urna para despedir a su padre como corresponde.
El polémico presentador refirió al homenaje estatal póstumo celebrado el pasado 6 de septiembre al actor en los pulcros jardines de la Unión Nacional de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), donde hicieron presencia familiares, amigos y funcionarios del Ministerio de Cultura (MINCULT), el que culminó con el mencionado esparcimiento en el pestilente río capitalino.
Otaola, quien hace años que no reside en la isla, reconoció que el río Almendares es «una pudrición, una asquerosidad, lo dragaron más o menos, pero es todo agua contaminada, es todo un asco, como todos los ríos y riachuelos en Cuba».
El mismo tildó a todos los participantes en la ceremonia de «ridículos», afirmando al fallecido: «Lo que no hacen en vida, después de muerto quieren demostrar que te quieren más».
“Por el amor de Cristo, no hay nada bonito para despedir a la gente que quieren. Ni al que se sacrifica, ni al que defiende a la Revolución, porque si había un comunista, era este hombre”, añadió.
El presentador señaló, cuestionando también que el homenaje no estuvo a la altura de lo que se merecía el primer actor cubano: “¡Miren la tinaja de río donde han puesto las cenizas, eso es de santeros, eso lo venden en las botánicas para echar a Olocun!”.
El Rey del Chisme contrastó la ceremonia con el sepelio, en Capilla ardiente, de Rosita Fornés, alegando que a la vedette cubana se le hizo un mejor acto que a Molina, por el hecho de haber llegado recientemente de Estados Unidos.
De igual forma, mencionó el hecho de que el artista de debe a su audiencia y al pueblo y que al público cubano le fue negada la posibilidad de decir adiós a una gran persona y un actor muy querido, cuya trayectoria dentro del cine, la televisión y el teatro ha dejado un gran legado.
Por último, llamó a «que se miren allí todos los artistas comunistas», pues un gran hombre terminó «triste, pobre». «Pero los comunistas tampoco valen nada para los propios comunistas”, finalizó.
Otaola la emprende contra el hijo del actor cubano Enrique Molina tras su muerte: «No fuiste capaz de comprar una urna para tu padre»
