Cifras oficiales indican que la cantidad de migrantes cubanos que se aventuran a cruzar la peligrosa selva del Darién para poder llegar a Estados Unidos ha aumentado significativamente en este año 2021.
Según los datos registrados por la Dirección Nacional de Migración de Panamá, ya suman 3.383 cubanos que han llegado ilegalmente a la nación centroamericana por la frontera con Colombia.
La isla se sitúa como el segundo país con mayor número de migrantes que llegan a Panamá para cruzar la selva, solo superado por Haití (con 8.621 migrantes). Las cifras solo ascienden: 176 cubanos en el mes de enero, 204 en febrero, 198 en marzo, 1.291 en abril y 1.514 en mayo.
Un total de 16.742 viajeros de países como Cuba, Haití, Chile, Brasil, India, Nepal, Senegal y Bangladesh, han arribado a territorio panameño hasta el cierre del mes de mayo.
En ese descabellado intento por llegar a Estados Unidos (territorio de donde seguramente serán deportados), un gran número de cubanos han fallecido. Por ejemplo, se conoció en el mes de abril que 4 migrantes cubanos se ahogaron cruzando un río en medio de la selva. Dos de ellos, Yleana Samon y Alberto Martínez (madre e hijo), venían originalmente transitando de Chile.
La nueva ola de emigración cubana hacia Estados Unidos se evidenció a finales del año pasado, pero no ha sido hasta este primer semestre del año 2021 que el fenómeno ha tomado verdadera fuerza. La nueva crisis migratoria cubana abarca también la nueva temporada de balseros que tratan de cruzar el estrecho de la Florida.
La Guardia Costera de Estados Unidos (USCG) ha reportado la interceptación de 323 migrantes cubanos en el presente año fiscal (comenzado el 1ro de octubre de 2020), un récord desde la derogación de la política de «Pies secos/pies mojados» (enero de 2017).
El número de muertes en los intentos de ingreso a territorio estadounidense por vía marítima es incluso mayor, y en los últimos meses ha naufragado y desaparecido más de una embarcación.