Guillermo Álvarez Guedes, fue uno de los humoristas cubanos más queridos por el público cubanos de las “dos orillas” y de los países latinoamericanos que lo aplaudieron.
Guillermo Álvarez Guedes comenzó su carrera artística en su pueblo natal, Unión de Reyes, Matanzas, donde nació el 8 de junio de 1927. Allí participó en funciones teatrales desde los 5 años de edad.
Tras darse a conocer en la radio desde finales de la década de 1940, debutó en la televisión gracias al productor y animador Gaspar Pumarejo. Su carisma y su sentido del humor le permitieron incursionar en sainetes, comedias musicales y espectáculos de cabaret.
Álvarez Guedes estelarizó Casino de la Alegría, Jueves de Partagás y un sinnúmero de programas estelares de la CMQ TV. Su mancuerna artística con la legendaria Rita Montaner, en la década de 1950, hizo historia en las tablas, la radio y la televisión cubanas.
Durante esa etapa apareció en las películas San Rifle en la Habana (Thief in Silk, 1953), Yo soy el hombre (1952) y La pandilla del soborno (The Big Boodle, 1957).
Entre sus múltiples facetas, Álvarez Guedes se destacó como el visionario productor discográfico del sello GEMA, que lanzó al mercado a Rolando Laserie, Celeste Mendoza, Elena Burke y otras estrellas de la canción.
“Le abrí muchos mercados a la música cubana. La impusimos donde no existía. De eso estoy muy orgulloso”, dijo en una entrevista en el año 2010.
Tras exiliarse en 1960, el humorista vivió en Nueva York y San Juan, Puerto Rico, donde retomó su labor musical, contribuyendo al lanzamiento de El Gran Combo de Puerto Rico, y lanzando las carreras discográficas de Danny Rivera y Luisa María Güell.
En las múltiples entrevistas que ofreció, Álvarez Guedes confesó que nunca recurría a amuletos “ni a todas esas porquerías” antes de presentarse frente al público. Tampoco usaba apuntador porque ejercitaba su memoria aprendiéndose los números telefónicos sin escribirlos.
Sobre la queja de algunos colegas, que culpaban a la audiencia cuando la función fracasaba, el humorista
Cuando se le preguntaba si algún día escribiría sus memorias, sostenía que si algún día se decidiría a escribirlas, sería cuando fuera “viejo”.
“Leopoldo Fernández, Alberto Garrido, Federico Piñero y Enrique Arredondo me dejaron el amor a la profesión y el respeto por el público”, reconoció en una ocasión al referirse a los grandes humoristas cubanos que le precedieron.
Álvarez Guedes se presentó en España, Latinoamérica y varias ciudades de Estados Unidos, grabó 32 discos de chistes, escribió libros —uno de ellos, la novela Cadillac 59 (2000)—, y apareció en las películas Dios te salve psiquiatra (1966), A mí qué me importa que explote Miami (1976) y Que todo quede entre cubanos (2008). Sus espectáculos unipersonales abarrotaron el Miami-Dade County Auditorium en innumerables ocasiones.
Hasta el año 2011, el artista fue la figura central de la revista radial Aquí está Álvarez Guedes, espacio de la Clásica 92.3 FM que compartió durante 15 años con el presentador Adrián Mesa.
Con su partida en el año 2013, el mundo del espectáculo hispano perdió una de sus estrellas más versátiles que supo traducir el “cubaneo” de sus chistes a un lenguaje universal.