El Gobierno cubano anunció, sin dar mucho detalle, que se comenzarán a expender en abril miles de cajas decodificadoras chinas para la señal digital de televisión, conocidas coloquialmente como “cajitas”.
El doctor por la Universidad de Zhejiang, Eduardo González, declaró que la tecnologías chinas han demostrado adaptarse grandemente al contexto cubano.
La entidad encargada de la comercialización con estos dispositivos será el Centro de Innovación y Desarrollo del Grupo de la Electrónica (Gelect), de acuerdo con el comunicado de la prensa oficial sobre la última visita de Miguel Díaz-Canel a la empresa.
Actualmente, y desde hace más de un años, la compra de estos aparatos resulta extremadamente difícil para los cubanos, pues el alto desabastecimiento ha provocado que las pocas ofertas se concentren a muy altos precios en el mercado negro nacional.
Una vecina del reparto Rajayoga (Santiago de Cuba) aseguró que divisó una oferta de una cajita en 2.500 CUP hace una semana en algunos grupos de Telegram y en Facebook. Lo peor es que esta constituye una buena oportunidad, dado que las tiendas tienen todos los anaqueles vacíos.
Aunque en la isla se transmiten señales de televisión analógicas y digitales, luego de la amplia campaña del Gobierno por hacer predominar los equipos receptores de televisión digital sobre los de televisión analógica, actualmente estos últimos continúan siendo mayoría en el país. El Gobierno, además, ha anunciado en varias ocasiones su intención de suspender la emisión de señal analógica en tiempos venideros, por lo que se debe totalizar la señal digital.
Con el cierre de las escuelas, las actividades docentes pasaron a ser realizadas únicamente mediante teleclases, cuyas transmisiones son por el Canal Educativo. Una madre capitalina comentó que intentó comprar una cajita, porque casi todos los canales, incluido el que necesitan sus hijos para estudiar, se apagaron analógicamente, pero que no había oferta en las tiendas y los aparatos pueden llegar a costar 3.500 CUP en el mercado informal.
Un vecino de Centro Habana aseguró que en el Centro Comercial Carlos III no existe oferta de cajitas ni televisores con el decodificador integrado, en ninguna de las tiendas en CUP o MLC.
El ministro de Comunicaciones aseguró que la digitalización de la señal televisiva es un “proceso necesario para ahorrar energía eléctrica y modernizar la tecnología obsoleta”.
La tecnología cobró auge en el país en 2013, cuando el Gobierno equipó 45.000 hogares de La Habana con dispositivos donados por China, y luego se comercializaron esras cajas receptoras en la red de tiendas.
El periódico Granma publicó que la norma china “permite que se desarrollen y fabriquen en Cuba televisores híbridos y cajas decodificadoras”, lo que evidencia que el Gobierno cubano quiso apoyar la soberanía tecnológica del país.
No obstante, finalizando el año 2014 se comenzó a registrar desabastecimientos de las cajas decodificadoras en la isla, ya que el Gobierno previó la compra de equipos para la venta hasta el 2015, cubriendo solo “entre un 25 y un 30% de la demanda”, según el portal. Cubadebate.