Hoy está cumpliendo 75 años de edad Mirtha Ibarra, una de las actrices cubanas con la sonrisa más bella, recordada por muchos por su papeles protagónicos en telenovelas como ‘El hombre que vino la lluvia’ y ‘Pasos hacia la montaña’, pero que realmente dejó huella en el corazón de los cubanos por su inolvidable personaje de Nancy en el filme Fresa y Chocolate.
Nacida en el municipio de San José de las Lajas en el año 1948, descubrió su amor por por las tablas desde pequeña, lo que la llevo a estudiar en la Escuela Nacional de Arte de Cuba. Sin embargo, no fue hasta 1967 que empezó su carrera en los escenarios, trabajando en varios grupos de teatro y siendo reconocida por obras como ‘Tiene la palabra el camarada mauser’ y ‘Week-en en Bahía’.
Su paso por la televisión no ha sido extenso, pero sin dudas sus personajes en telenovelas como ‘Pasos hacia la montaña’ y ‘El hombre que vino con la lluvia’ dejaron su rostro en el recuerdo de los que siguen la pequeña pantalla en la Isla.
El cine ha sido su verdadera casa, donde demostró su madurez como actriz, cuando en el año 1983 protagonizo la película ‘Hasta cierto punto’, dirigida por Tomás Gutiérrez Alea «Titón», de quien se enamoró perdidamente y junto al que estuvo hasta el ultimo minuto de su vida por 23 años. Por este filme recibió ese mismo año el Premio Coral a la Mejor Actriz, en el Festival Internacional del Nuevo Cine Latinoamericano.
«Yo empezaba en el cine y me sentía desprotegida, frágil y Titón me dio esa confianza que necesitaba (…) En una de las tomas de Hasta cierto punto yo le pedí repetir la escena y él se negó, empecé a llorar y después me di cuenta de que tenía toda la razón cuando me dijo que estaba bien y hasta de premio. Así fue: obtuve el Coral de Actuación por esa película», confesó hace unos años Mirtha Ibarra.
Su consagración llegó 10 años después, cuando sorprendió en 1993 con su papel de Nancy en la recordada película Fresa y Chocolate, por el que nuevamente fue reconocida en el Festival de Cine Latinoamericano con el Premio Coral a la Mejor Actriz de Reparto.
En 1995 vuelve a ser dirigida por Titón y Juan Carlos Tabío en el filme Guantanamera, confirmándose como la musa del fallecido director y siendo redescubierta por Tabío, quien le pidió que se uniera a dos proyectos filmados luego por él: ‘Aunque estés lejos’ y ‘El cuerno de la abundancia’.
La muerte de su esposo la llevó a replantearse su vida y volvió a escribir para el teatro, de donde nació la obra ‘Obsesión habanera’, que la hizo ganarse el respeto y el aplauso del publico, llevándola a realizar una extensa gira por España para presentarla.
Dice que el cine le da miedo, pero que no descarta la opción de hacer una película, aunque ya fue realizadora del documental Titón: de La Habana a Guantanamera, homenaje póstumo a fuera su compañero en la vida.
Al preguntársele en una entrevista qué amores la mantienen vida, confesó: «Toda mi familia, los amigos y la poesía que nos enriquece a diario y nos hace ver la vida de manera diferente».
https://www.youtube.com/watch?v=dRP4rNji7J0