Los 3 migrantes cubanos que fueron rescatados por la Guardia Costera estadounidense, luego de sobrevivir durante 33 días a base de cocos, caracoles y ratas en una isla deshabitada del archipiélago de Las Bahamas, permanecen retenidos por la agencia federal de Inmigración del país norteamericano y con serio peligro de deportación.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) declaró que estos dos hombres y una mujer se encuentran en el centro de detención para inmigrantes del Condado de Broward (Broward Transitional Center) en el sur de Florida. Fueron recuperados el martes de Anguilla Cay.
La agencia federal aseguró que recibieron atención médica y tendrán acceso a los procesos legales que las normas del país les dispongan. No se precisó, por estar sujetos a las leyes de privacidad de los detenidos, si alguno de ellos había solicitado asilo en Estados Unidos.
Los tres individuos fueron trasladados al centro de detención de Pompano Beach el miércoles 10 de febrero, luego de que hayan sido ingresados en el hospital Lower Keys Medical Center, en Cayo Hueso (extremo sur de Florida), a pesar de no presentar heridas de gravedad.
#BreakingNews @USCG is assisting 3 people who have reportedly been stranded on Anguilla Cay, Bahamas for 33 days. An Air Station Miami HC-144 Ocean Sentry aircrew has dropped a radio, food and water. More to follow.#D7 #Ready #Relevant #Responsive #searchandrescue #USCG pic.twitter.com/D263ptTarz
— USCGSoutheast (@USCGSoutheast) February 9, 2021
La tripulación del helicóptero de los guardacostas que los transportó fuera de la isla fue la que primeramente escuchó la historia de estos cubanos, quienes venían a bordo de una embarcación que se hundió unas 5 semanas antes, desde la que sólo estas 3 personas lograron nadar hasta la islita, ubicada en el extremo sureste de Cay Sal Bank.
El teniente Justin Dougherty, portavoz de la Guardia Costera, recalcó que aún no entiende cómo lograron mantenerse en tan buen estado de salud.
La agencia norteamericana señaló que los cubanos fueron divisados por los guardacostas en una patrulla aérea de rutina gracias a que llamaron la atención ondeando una bandera improvisada, pero el mal tiempo imposibilitó que se pudieran rescatar el mismo día.
No obstante, los guardacostas se preocuparon por lanzarles botellas de agua, comida y una radio desde el aire, algo que evidenciaron desde las redes sociales.