La recién jurada como congresista de Estados Unidos, la cubanoamericana María Elvira Salazar, ha presentado un proyecto de ley frente a la Cámara de Representantes con el que busca impedir la normalización de la relaciones entre el presidente electo Joe Biden y el Gobierno cubano, una vez que tome el poder como nuevo gobernante en la Casa Blanca el próximo 20 de enero.
Esta propuesta pretende garantizar que Cuba no sea sacada de la lista de países que patrocinan el terrorismo, exigiendo a cambio de su eliminación del listado que las autoridades en la isla liberen a todos los presos políticos y se comprometan a realizar elecciones «libres y justas», entre otros requisitos.
María Elvira, representante del Distrito 27 de Florida, está siendo apoyada por el congresistas Mario Díaz-Balart (FL-25), el congresista Carlos Giménez (FL-26), la congresista Nicole Malliotakis (NY-11), el congresista Alex Mooney (WV-02), la congresista Stephanie Bice (OK-05), el congresista Neal Dunn (FL-02), la congresista Kat Cammack (FL-03) y el congresista Michael Waltz (FL-06); todos ellos convencidos de que el proyecto puede terminar con «el reinado de los Castros».
La ley HR 287, identificada por sus propios promotores como Ley Fuerza, busca «evitar que Cuba patrocine el terrorismo, (…) y evitar que la brutal dictadura de Castro sea eliminada de la Lista de Patrocinadores del Terrorismo del Estado hasta que cumpla con los requisitos de la Sección 205 de la Ley LIBERTAD», según comentó María Elvira a la prensa.
El artículo 205 de la Ley LIBERTAD requiere que Cuba cumpla con las siguientes condiciones:
- Liberar a todos sus presos políticos y permitir que las organizaciones internacionales de derechos humanos competentes investiguen las cárceles cubanas.
- Transición del régimen de Castro a un sistema que garantice los derechos del pueblo cubano a expresarse libremente.
- Comprometerse a realizar elecciones libres y justas.
Estos son los mismos requisitos que deben cumplirse para levantar el embargo y las sanciones que lo acompañan contra el Gobierno cubano. En otras palabras, este proyecto de ley obliga a los gobernantes en la mayor de las Antillas a cumplir con la ley estadounidense existente.
«Como hija de refugiados cubanos que huyeron de la brutal dictadura que continúa encarcelando, pasando hambre, asesinando y oprimiendo sistemáticamente al pueblo de Cuba, me enorgullece presentar la Ley FUERZA», comentó la periodista cubanoamericana.
La Ley FUERZA busca responsabilizar «al régimen de Castro por albergar a fugitivos del sistema de justicia estadounidense, apuntalar a los regímenes de Maduro y Ortega en Venezuela y Nicaragua, respectivamente, y participar en actos violentos de terrorismo en todo nuestro hemisferio”, dijo la congresista.