En la mañana de hoy se dio a conocer de forma oficial la convocatoria para el 8vo Congreso del Partido Comunista de Cuba, en el que se espera que Raúl Castro, Primer Secretario de esta organización, anuncie de forma oficial su retiro y deje el puesto en el todopoderoso PCC en manos del actual presidente del país, Miguel Díaz-Canel.
La convocatoria para la celebración del 8vo Congreso del único partido político permitido por el Gobierno durante los últimos 60 años fue leída por José Ramón Machado Ventura, el número dos de esta organización política, quien precisó que se realizará entre los días 16 y 19 de abril del 2021.
Poniendo quizás el parche ante que salga la gotera, y en un misterioso adelanto de lo que ya se espera, Machado Ventura comentó que este congreso “será un hecho de la continuidad, pues la Revolución no se circunscribe a quienes la llevaron al triunfo el 1ro de enero de 1959, sino a los que la hacen suya y la defienden todos los días”… más claro ni el agua ¿verdad?
La cúpula del PCC ya había tratado los preparativos de su próximo congreso en una reunión a inicios de octubre pasado, liderada por Raúl Castro, quien ha espaciado sus apariciones públicas desde que dejara la jefatura del Estado en 2018.
El último cónclave de los comunistas cubanos se celebró en abril de 2016, cuando Raúl Castro recibió de su hermano Fidel (retirado del poder desde 2006) el relevo como primer secretario de la formación partidista.
Contando los meses para su retiro, el octogenario general tiene poco más o menos todo cuadrado, calculando, claro está, las posibles consecuencias de una pérdida exponencial de poder porque sabe que aún ejerciendo el mando tras bambalinas, como se prevé, habrá un puñado de decisiones que ya no le consultarán y, como pasó con Fidel, quedará fuera del poder.
Sin embargo, la idea de que Raúl Castro abandone efectivamente algún día la vida política cubana también tropieza con grandes dosis de escepticismo.
“No nos guiemos por esa apariencia de abuelo bueno que se va a sentar a ver pelear sus gallos, que es lo que a él le gustaría hacer. A mí me dijo en varias ocasiones que él hubiera sido feliz teniendo una valla de gallos allá, por su terruño de Birán. De allí lo sacó Fidel Castro en los años 50 y se lo llevó para La Habana”, dijo en una entrevista hace dos cuatro años Alcibíades Hidalgo, quien durante casi una década fue jefe del despacho político de Raúl Castro.
A Raúl Castro le construyeron una lujosa finca en las cercanías del Segundo Frente Oriental, donde se encuentra ubicado el panteón de su esposa fallecida Vilma Espín. El lugar está a menos de cien kilómetros del centro de Santiago de Cuba.
Aunque no hay una fecha fija, el líder cubano se instalará -según confirmaron fuentes anónimas en su momento-, en un futuro cercano.
