El polémico presentador Alexander Otaola fue arrestado en la tarde de ayer frente al restaurante Versailles, en la Calle 8, cuando oficiales del Departamento de Policía de la ciudad de Miami decidieron llevarlo detenido en medio de la manifestación que había convocado en apoyo a los miembros del Movimiento San Isidro en Cuba.
El Rey del Chisme fue liberado solo una hora después, gracias a la intersección de la congresista cubanoamericana María Elvira Salazar y el alcalde de Miami, Francis Suárez, quienes se comunicaron con las autoridades policiales.
Aunque Otaola aclaró luego que tenía todos los permisos necesarios para la manifestación, en los videos subidos a las redes sociales se puede escuchar como los oficiales del Departamento de Policía de Miami pedía a los manifestantes que se retiraran del lugar porque la protesta era “ilegal”, acusación que fue refutada por Otaola quien aseguró que, tenían los permisos para la manifestación y pedía hablar con los agentes.
En una transmisión realizada en la noche por el presentador ya desde su casa, este dejó entrever en sus declaraciones que su arresto pudo ser algún “encargo”.
“Un sargento se la agarró conmigo y pareciera que tenia una orden especifica de agarrarsela conmigo”, comentó Otaola.
“Yo ni siquiera había comenzando a decir las primeras cosas cuando el hombre se puso molesto y se acercó para decirme que tenía que irse todo el mundo del lugar o los metería presos”, agregó.
Alex cree que la policía les debe una disculpa, tanto a él como al resto de los manifestantes, y está seguro que ese será un paso que las autoridades darán esta semana.
“Esto fue un malentendido, pero cuando analizamos esto vemos que le conviene a la dictadura porque ahora podrían decir que en Miami también meten presa a la gente por protestar”, enfatizó el presentador.
“Lo que querían era que el titular del arresto de Otaola opacará el objetivo del llamado y eso no lo pueden opacar, ni podemos permitir que lo opaquen”, dijo sobre el tema.