Unos doscientos artistas cubanos, entre ellos gran parte de la vanguardia cultural del país, fueron protagonistas hace unas horas de una movilización excepcional frente al Ministerio de Cultura de Cuba, cuya sede radica en la Habana, para exigir al Gobierno más libertad de expresión y creación.
El reclamo llegó tras la disolución policial, en la noche anterior, de una protesta de 10 días del Movimiento San Isidro (MSI), alegando riesgo de “contagio epidemiológico”, según reseñó el diario oficialista Granma, donde se aseguró que uno de los huelguista había llegado días antes desde Miami y su examen PCR había dado alterado, por lo que necesitaban sacar a todos los que estaban dentro de la casa por riesgo a que pudiesen quedar infectados de coronavirus.
Del grupo que se manifestó ayer, 30 de ellos fueron recibidos por el viceministro Fernando Rojas para escuchar sus demandas, tras más de nueve horas de espera frente a la sede ministerial. Sin embargo, la condición para realizarse el encuentro es que ninguno portara sus celulares y estos fuesen dejado fuera.
El grupo quería presentar demandas, previamente aprobadas a mano alzada en plena vía pública. El pliego de demandas incluye la libertad de creación y expresión, derecho al disenso y cese de la represión y hostigamiento a los artistas, según dijeron.
También, la discusión pública del polémico decreto 349, que obliga a quienes sean artistas a adherirse a una institución estatal. Dicho decreto ha generado mucha tensión entre artistas independientes y el Gobierno ya que -bajo el pretexto de “proteger la cultura”- prevé sanciones para el que use irrespetuosamente símbolos patrios o mantenga “conductas violatorias de las normas y disposiciones vigentes en materia de política cultural”.
A prudencial distancia, numerosos agentes de la seguridad del Estado y algunos policías de uniforme observaban la protesta sin intervenir. La movilización es inusual en Cuba, donde muy pocas veces se da permiso para realizar manifestaciones.
Entre los que llegó al lugar para apoyar a los manifestantes estuvo el popular actor Jorge Perrugorría, conocido por su papel protagónico en Fresa y Chocolate, quien dijo a los presentes que “es la hora de dialogar y creo que ustedes los jóvenes deben ser escuchados”.
El director de cine Fernando Pérez, un veterano cineasta de 76 años, agregó brevemente: “estamos aquí para decirle al Ministerio de Cultura que los reciba, y que ese va a ser el inicio de un nuevo lenguaje”.
Entre los artistas que llegaron a apoyar la, además de Pérez y Perugorría, están los actores Mario Guerra y René de la Cruz, el cineasta Carlos de la Huerta, el cantante Leoni Torres, el rapero Athanai y el pianista Roberto Carcassés.