Hace solo unas horas el Gobierno de Costa Rica hizo un anuncio que ha llenado de esperanzas a cientos de inmigrantes cubanos que esperaban en ese país por una solución para sus casos de asilo, pues una nueva ley les permitirá acogerse a una «categoría de protección temporal» que les concederá una opción para asentarse en esta nación.
La categoría nueva brindará permanencia en Costa Rica por un período de dos años prorrogable, con derecho a realizar actividades laborales, a los cubanos que no calificaron para obtener refugio.
La nueva condición migratoria fue publicada este jueves en el diario oficial La Gaceta como una resolución de la Dirección General de Migración y Extranjería.
«En virtud de la protección que requieren las personas migrantes afectadas por la situación política, sanitaria y social que se vive en Venezuela, Nicaragua y Cuba, se considera oportuno la implementación de un sistema de protección complementaria» para permanecer en Costa Rica, señaló la resolución.
La publicación en La Gaceta citó pronunciamientos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre la situación de Cuba que ha impulsado a parte de sus poblaciones a buscar asilo en el exterior.
Precisó que Costa Rica registró un «aumento considerable» de solicitudes de refugio de cubanos tras el fin de la política de pies secos / pies mojados que les permitía acceder a los Estados Unidos hasta el 2017.
Para acogerse a la nueva condición, el solicitante debe demostrar que tuvo su petición de refugio denegada y que no tiene antecedentes penales, los cuales deber estar certificados en Cuba o por el Consulado cubano en Costa Rica.
Por décadas la brújula de los cubanos, como todas las brújulas siempre señaló al norte. Hasta que un día el entonces presidente Barack Obama decidió poner fin a la política de pies secos/pies mojados y el campo magnético en la Isla pareció volverse loco.
Miles de cubanos, que antes hubiesen salido hacia su natural destino migratorio en los Estados Unidos, se encontraron desorientados y decidieron probar suerte en Sudamérica, si total, peor que en Cuba no se podía estar.
En la misma medida en que caía el número de cubanos que arribaban a Estados Unidos comenzaron a aumentar los que solicitaban refugio en los países sudamericanos, sólo hasta junio de 2018 unos 1 106 cubanos habían solicitado asilo en Brasil.
Otros, la mayoría, tras cruzar la frontera se dirigen a Boa Vista y Manaos. Allí se organizan en grupos e intentan alcanzar Chile y Uruguay, los destinos más apetecibles.
Chile, al igual que Uruguay, recibe cada vez más migrantes cubanos. Según los datos ofrecidos por el Departamento de Extranjería y de Migración de Chile, 11,119 llegaron al país sudamericano en 2019. La mayoría ha conseguido empleo y busca regularizar su situación legal en el país.