Una iniciativa ha tomado fuerza en las ultimas horas en las redes sociales, a la que ya se han miles de cubanos que piden que el Teatro Karl Marx, en La Habana, originalmente llamado Blanquita, pase a llamarse ahora Teatro Rosita Fornés, en homenaje la gran vedette de Cuba.
La propuesta, a la que ya se ha sumado cientos de internautas en sus muros de Facebook, donde simplemente escriben: “Me sumo a la iniciativa de varias personas de cambiarle el nombre al Teatro Karl Marx por el de Teatro Rosita Fornés”.
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Sobre el escenario del Teatro Karl Marx, La Rosa de Cuba protagonizó espectaculares actuaciones, entre ellas varias obras de teatro como la inolvidable Hello Dolly.
Allí también se le rindió homenaje cuando cumplió 90 años de vida y los 74 de carrera artistica.
Según cuenta una persona cercana a la Fornés, ella se negaba a llamarle al teatro por su nombre actual y siempre defendió su nombre original: Blanquita.
“Ese teatro tiene un nombre falso, es como si yo ahora me muero y ponen en mi tumba: Vladimir Ilyich!”, aseguran que comentaba cada vez que le mencionaban el Teatro Karl Marx.
Hoy en Miami le dará el ultimo adiós a la gran Rosa Fornés, quien falleció el pasado miercoles a los 97 años de edad.
Sus restos mortales están siendo velados desde las 6 de la tarde de hoy (hora local) y hastas la medianoche en la funeraria Auxiliadora, sita en el 6871 Bird Road.
Cumpliendo su última voluntad, sus restos se trasladarán posteriormente a Cuba y serán depositados en el Cementerio de Colón, en La Habana, en el panteón familiar donde están enterrados sus padres y seres más allegados.
En La Habana se organizarán una serie de homenajes a la artista que vino al mundo en Nueva York el 11 de febrero de 1923 y era hija de españoles emigrados a Cuba, según ha informado el Ministerio de Cultura (MINCULT) en la isla.