Si una persona que no nació en Cuba escuchara que los que sí lo hicieron “se la saben todas”, no tardaría quizás en pensar que son arrogantes, prepotentes y ridículos. Sin embargo, si un cubano escucha la frase, de seguro le saca una sonrisa al recordar a algún conocido o se siente identificado.
En cada rincón de la Isla pueden encontrase personajes que son expertos en alguna materia y, aunque no posean estudios o conocimientos previos sobre el tema, saben y hablan con tal destreza que pareciera que se trata del que más sabe al respecto.
Con el caso de los enfermos no son pocos los conocen los mil y un remedios para curar prácticamente cualquier padecimiento a base de alternativas. Si es el caso de una mujer embarazada esta persona es la que más sabe sobre ejercicios para el feto y los mejores cuidados dietéticos, también sabe que sucede mes a mes con la gestante, y hasta conocerá las etapas del desarrollo del embrión.
Si se rompe algún equipo electrodoméstico, no falta en cada barrio un manitas que da igual si es una olla arrocera, una lavadora o una plancha; él sabe lo que hay que hacer en cada caso y no solo dará un diagnóstico de lo que sucedió, sino que lo más probable es que intente repararlo.
Hay muchos cubanos que se han convertido en expertos meteorólogos luego de tantos años sufriendo los embates de ciclones tropicales, siguiendo los partes del tiempo y de la defensa civil. Estos personajes lo mismo hablan sobre las mareas, la erosión de las costas, el hueco en la capa de ozono, o el cambio climático.
Los cubanos se han convertido en expertos críticos de cine y comentaristas deportivos, lo mismo te encuentras a algunos hablando de la erosión de las costas que del cambio climático.
En el caso de la cocina los cubanos llegamos y paramos. No hay un cubano que al preguntarle no te de toda una disertación sobre culinaria e incluso cite algún que otro tip que se lo pasó su abuela, quien era una bárbara en la cocina.
Generalmente este tipo de personas que se las saben todas terminan siendo entrometidos e inoportunos, y en ocasiones insistentes. Para algunos es bastante molesto o aburrido que que nunca digan que no saben sobre algo, pero lo cierto es que, sea cual sea el tema, al hablarlo con un cubano puede que te lleves más de una sorpresa.
